Por tercer año consecutivo, la Asociación de Empresarios de Salas
de Fiestas de Balears ha vuelto a plantar cara al festival
organizado por la MTV, que este año intenta celebrar en el
hipódromo de Sant Rafel. Mediante un escrito, la asociación ha
comunicado al Consell su tajante oposición a que otorgue el
permiso, para lo cual ha argüido las mismas razones de los últimos
años: supone una «competencia desleal», en palabras de su
presidente, Pedro Vidal.
En el documento se recuerda a la institución insular que el
concierto de la MTV incumple las «normativas de seguridad,
salubridad, ruidos y medio ambiente». Pero el principal argumento
es que «no se puede otorgar una licencia de actividad singular,
excepcional y extraordinaria a un evento que se celebra
periódicamente», según Vidal. Precisamente por ese carácter
singular y excepcional, el presidente de las discotecas no entiende
que «ese espectáculo tenga ánimo de lucro»: cada entrada costará
8.500 pesetas.
A los empresarios les molesta especialmente las facilidades con
las que ha contado la MTV en años anteriores: «A las discotecas se
las exige una serie de condiciones, mientras otros pueden hacer
idénticas actividades sin pasar por esa normativa y sin hacer
apenas inversiones. Nosotros no estamos contra la MTV, sino contra
el hecho de que se traigan esos conciertos. Se supone que todos
debemos ser iguales ante la ley», señala.
De momento, el escrito remitido por los empresarios no ha sido
respondido por el Consell: «Suponemos que se debe a que aún no han
dado el permiso. Pero en caso de que lo concedan queremos que nos
den copia de todas las normativas con las que justifican esa
decisión». El siguiente paso sería, probablemente, la interposición
de un contencioso.
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