GUILLERMO ROMANÍ Manel Font, técnico de compostaje de Amics de la Terra Balears, explicó ayer en el Ayuntamiento de Formentera en qué consiste el compostaje doméstico, plan al que se han adherido por el momento 112 personas en la isla. Font estuvo acompañado por el concejal de Medio Ambiente, José Ramón Mateos, y por Hazel Morgan, presidenta de Amics de la Terra en Eivissa y Formentera. Para Font lo más importante de esta campaña que se pone en marcha es, en primer lugar «la excelente acogida por parte de la población ya que hemos recibido 112 solicitudes de compostadores hasta el momento», señalando que tras la entrega de los 55 primeros, que se realizó a última hora de la tarde, en breve se repartirán los 57 restantes que ya han sido encargados y están a punto de llegar a la isla.

Para Font es una muestra de «la tradición que existe en Formentera de aprovechar los residuos para enriquecer la tierra» y confía en que a la larga, en poco tiempo «ésta será una iniciativa que funcionará de forma autónoma, y aunque existan ayudas institucionales, lo más importante es la concienciación de la población». Font señaló asimismo la importancia de la experiencia que se realiza, por primera vez, en una isla de reducidas dimensiones, ya que hasta la fecha Amics de la Terra ha actuado en Calvià, Sóller, Pollença y otros municipios de Mallorca, pero «nunca en un espacio limitado y con un único ayuntamiento como ahora».

A través de esta experiencia, hasta ahora sólo doméstica, van a integrar a los grandes productores de residuos como son los hoteles y restaurantes mediante pruebas piloto que se realizarán este verano. Este plan de compostaje «repercute en toda la materia orgánica de la isla -dijo Font-, por lo cual hay que empezar a plantearse temas como la limpieza de bosques, reutilización de material procedente de podas por que hay que ver cómo canalizar este material importante para un compostaje correcto».