El alcalde de Sant Joan, Antoni Marí Mari, Carraca, lamentó ayer la
resolución de la sala de lo Contencioso-Administrativo del Tribunal
Superior de Justicia (TSJ) de Balears por la que se desestima la
solicitud del Consistorio de suspender la Norma Territorial
Cautelar aprobada por el Consell Insular el pasado 27 de octubre.
Marí considera que el tribunal se ha equivocado al interpretar que
en este caso «los intereses generales priman sobre el del
particular desfavorecido». Según el alcalde, ha sido el
Consistorio, y no el Consell, «el que ha actuado en defensa de los
intereses generales de la localidad».
El principal temor del alcalde es que la moratoria y el
posterior Plan Territorial Insular pitiuso deje sin población
autóctona al municipio. Marí explicó que son numerosos los casos de
familias que han abandonado Sant Joan para vivir en Santa Eulària,
Santa Gertrudis, Puig den Valls y Eivissa, ya que las restricciones
urbanísticas impuestas les impide construir sus propios hogares. Su
lugar está siendo ocupado por residentes extranjeros.
Respecto al razonamiento jurídico del auto del TSJ en el que se
advierte de que los eventuales perjuicios económicos podrán ser
reparables «con las correspondientes indemnizaciones», Marí augura
que cuando el tribunal dicte sentencia se producirá un aluvión de
indemnizaciones que provocarán la paralización del Consell. En los
próximos días los asesores jurídicos del Consistorio decidirán si
es conveniente presentar contra el auto un recurso de casación ante
el Tribunal Supremo.
Sin comentarios
Para comentar es necesario estar registrado en Periódico de Ibiza y Formentera
De momento no hay comentarios.