El presidente del Govern de les Illes Balears, Francesc Antich,
mostró ayer su apoyo a los empresarios de Formentera en el
transcurso de una recepción que tuvo lugar en el Consolat de Mar,
sede del Ejecutivo autonómico, y en la que Antich escuchó las
quejas de este sector en relación con el problema del transporte de
mercancías entre Eivissa y la Formentera.
Al tiempo, el presidente autonómico anunció a los empresarios su
voluntad política de actuar una vez se conozca el dictamen del
estudio que una empresa privada está realizando y cuyas
conclusiones se conocerán en la primera quincena de abril.
La directiva de los empresarios de Formentera se entrevistó con
el presidente Antich y con el vicepresidente del Govern, Pere
Sampol, y estuvo acompañada durante la visita por el vicepresidente
segundo del Consell Insular d'Eivissa y Formentera y conseller
responsable de la coordinación con Formentera, Santiago Ferrer.
El motivo de la reunión, que se celebró a petición de la propia
Pime de Formentera, era «expresar la preocupación por lo que
consideramos una práctica monopolística en el transporte de
mercancías», dijo el máximo representante de los empresarios
formenterenses, Joan Serra i Mayans. Serra i Mayans dijo que «el
presidente Antich está al tanto de lo que está sucediendo, ha sido
puntualmente informado y ha reconocido su preocupación por el
retraso excesivo en la redacción del informe».
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