«Me gusta enseñar el punto de vista que la gente no ve»

Su curriculum como aficionado a la fotografía comenzó hace dos años y medio. «Antes, cuando tenía más tiempo, siempre salía a la calle con mi F-70 dispuesto a fotografiar lo que me llamase la atención», comenta Adrià, quien se define como «un simple observador al que le gusta enseñar el punto de vista que la gente no ve de detalles de estatuas y cosas de lo más cotidianas».

La fotografía con la que ha ganado el concurso, «Manos», no es precisamente una muestra de detalles de lo cotidiano, pero sí de la creatividad de su autor: «En este caso se trata de la fotografía de cuatro manos, dos de hombre y dos de mujer, puestas sobre un fondo luminoso captadas en picado en lo que lo verdaderamente importante es el contraste de luces, la posición de las manos y las diferentes texturas», explica. El doble ganador confesó estar sorprendido por el veredicto «por haber sido elegido dos veces consecutivas y por el tema de la foto, ya que las manos han sido ya muy tratadas, por eso me he quedado un poco parado al conocer la noticia de que había quedado de primero».

Adrià Tugues explica su predilección por la fotografía en blanco y negro porque es más expresiva, por los contrastes y por el acabado final que se obtiene en mate. «Es más fácil de tratar que el color y de combinar el balance de grises. Hacer fotografías a color es más complicado a la hora de tratar los colores». De momento Adrià, que no se ha presentado a ningún otro certamen fotográfico por no enterarse a tiempo, seguirá practicando la fotografía como afición, mostrando su personal punto de vista de las cosas a través del lenguaje de la imagen. «Se pueden decir muchas cosas con una fotografía, de hecho, un buen fotógrafo es aquel que tiene una idea y la sabe plasmar y exponer al público en una imagen, algo que no es del todo fácil», dice Adrià.