Dos años después de que el director territorial del Insalud, Javier Rodrigo de Santos, asegurara en Eivissa que las obras de Can Misses estarían finalizadas en 2001, la certeza adquiere poca consistencia ante las reformas pendientes de realizar: Maternidad, el área de quirófanos o la climatización de Can Misses. En áreas del hospital, como consultas externas, donde se registra una mayor afluencia de gente se sigue sin contar con aire acondicionado. Las habitaciones de Maternidad no disponen de duchas, sino que hay comunes para toda la planta.

Las obras de Can Misses han marcado la actividad del hospital en estos últimos años. «Son unas obras necesarias, pero incómodas», aseguraban desde el Insalud, que agradecieron la colaboración prestada por el personal. Las reformas ya realizadas también se han visto envueltas en una cierta polémica, sobre todo por las goteras. En la nueva biblioteca del hospital varios cubos colocados anteayer en el suelo revelaban la existencia de goteras. Además, la zona de los sindicatos tampoco se ha librado de ciertas imperfecciones acometidas durante la reforma de la obra. Las mejoras realizadas en Urgencias no cuentan con el beneplácito de todo el personal, aunque otras áreas como Psiquiatría o la UCI ha mejorado el aspecto de Can Misses.

El hospital recibió el martes pasado la visita del subdirector de Obras del Insalud, Domingo Menéndez, para comprobar «in situ» el estado de las obras. Una visita inusual, ya que hasta ahora siempre había supervisado los trabajos un técnico del Insalud.

Después de esta visita, una portavoz del Insalud aseguró que las obras continuaban. El gerente del Area de Salud, Carmelo Sansano, evitó pronunciarse sobre la visita de Menéndez a Can Misses y la continuidad de las actuaciones previstas. «No quiero decir nada», manifestó Sansano de manera taxativa. El Insalud presupuestó 539 millones para el año pasado. El coste total de las actuaciones previstas asciende a 1.100 millones de pesetas. ¿Habrá suficiente dinero?