El plazo para presentar alegaciones a la Norma Territorial Cautelar (NTC) aprobada por el Consell Insular de las Pitiüses el pasado 25 de julio se dio ayer oficialmente por cerrado después de haber sido ampliado una semana más por la importancia de la nueva normativa. Aproximadamente 80 entidades y particulares habían entregado a última hora de la mañana de ayer sus sugerencias solicitando que la institución las tenga en cuenta y las incluya en el texto.

A partir de ahora, según explica la institución, todas las alegaciones serán estudiadas y si se considera que alguna de ellas mejora la norma se introducirán los cambios antes de proceder, en un plazo máximo de tres meses, a la aprobación definitiva del texto.

El conseller encargado de la ordenación del territorio, Josep Marí Ribas, ha avanzado durante las últimas semanas que se introducirán algunos cambios para mejorar la redacción de la Norma, aunque en principio no se esperan modificaciones de gran calado que varíen el espíritu de este texto, con el que se pretende salvaguardar el estado actual de la isla hasta que se apruebe el Plan Territorial Insular.

Algunas de las alegaciones presentadas no tienen por objetivo modificar aspectos puntuales de la normativa, sino que exigen su retirada completa, como es el caso de las presentadas por el Partido Popular. Esta formación entiende que la NTC atenta contra principios constitucionales y, especialmente, contra la autonomía municipal. En el sentido contrario, también ha habido colectivos que han sugerido que la norma vaya más allá y sea más ambiciosa para conseguir una verdadera protección del territorio de las Pitiüses. Con esta intención han presentado sus propuestas la formación Els Verds, el Grup d'Estudis de sa Naturalesa o Amics de sa Terra.