Aina Vicens inspeccionó ayer la obra en la que sufrió un accidente mortal un trabajador de la construcción.

Los inspectores de Trabajo sólo se desplazan a Eivissa una vez al mes en una isla donde 80 empresas presentan problemas de siniestralidad laboral y en la que últimamente se han producido varias denuncias sobre higiene industrial, al detectar niveles de polvo «tremendos» en algunas empresas, según la directora de Salut Laboral del Govern, Aina Vicencs, que ayer se desplazó a Eivissa para inspeccionar personalmente el lugar donde murió un trabajador, de 24 años, a consecuencia de un accidente laboral. La Conselleria de Treball ha iniciado una investigación para determinar las causas del accidente laboral.

La directora de Salut Laboral no quiso avanzar detalles sobre el informe que está elaborando un técnico de la Conselleria sobre el accidente. Vicens precisó que se produjo «una desestabilización de un andamio», justo en el momento que otro trabajador vertía hormigón por un tubo de desescombro, lo que provocó que se soltara uno de los anclajes. La investigación determinará si el trabajador iba protegido con un arnés en el momento del accidente. El informe de Salut Laboral, que elabora un técnico que se desplazó a Eivissa, se remitirá a Inspección de Trabajo.

Vicens destacó que 80 empresas de las Pitiüses, con menos de 25 trabajadores en su plantilla, presentan una mayor siniestralidad laboral. La mayoría del sector de la construcción. Ante la falta de inspectores, explicó que «ha insistido ante la Inspección de Trabajo para crear plazas en Eivissa y Menorca y ha sorprendido un poco que sea sólo en Menorca», pero añadió que reiterará su propuesta. «Continuaremos insistiendo», señaló. Salut Laboral ha firmado un convenio con la Inspección de Trabajo, dependiente de la Administración central, para colaborar conjuntamente.