La Asociación de vecinos de sa Capelleta y varios vecinos del
barrio se personarán en el caso del café-concierto de la Vía
Púnica, que ha terminado en los tribunales al denunciar los
promotores de este negocio la negativa del Ayuntamiento de Eivissa
a otorgarles la licencia.
Los vecinos están «animados» y confían en que el caso se acabará
ganando, según explicó el presidente del colectivo, Javier
Escudero, tras la reunión que mantuvieron anteanoche para preparar
sus acciones. Escudero actuará como coordinador y ha hecho un
llamamiento a todas aquellas personas que en su día presentaron
alegaciones contra el proyecto para que se puedan sumar los
esfuerzos y lograr una oposición más fuerte. En los próximos días
se contratará una procuradora y se iniciarán los trámites para
luchar contra esta instalación que los vecinos consideran que sería
muy negativa para sus intereses.
En estos momentos, según indicó Escudero, la Asociación cuenta
ya con 60 socios que podrían ser un centenar de aquí a diez días.
El presidente está satisfecho de la fuerza que está cobrando en
estos momentos el colectivo, tras el gran trabajo que costó
revitalizarlo hace unos meses tras años de inactividad.
Precisamente para modernizar sus antiguas estructuras será
necesario hacer cambios en los estatutos que, por ejemplo,
contemplan como sede la antigua biblioteca de «la Caixa». Por lo
que se refiere al nuevo local que el Consistorio ha cedido a la
Asociación, Escudero explicó que aún no está formalizada dicha
entrega y que tampoco se cuenta todavía con el presupuesto de la
reforma que habrá que realizar.
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