El vicepresidente ejecutivo de Neckermann, Lothar Buss, afirmó ayer que el touroperador está registrando en estos momentos un incremento de clientes con respecto al año pasado del 6 por ciento. Buss reconoció, sin embargo, que las ventas no están evolucionando en Balears tal y como se había esperado en un principio, por lo que prevé que la temporada finalizará con unos registros muy similares a los del año pasado, considerados excelentes por todo el sector turístico.

«Para el año actual habíamos planificado un aumento del 5 por cien, pero no creo que se vaya a llegar a esa cifra. Estamos contentos porque podemos tener 182.000 como el año pasado y ese es ahora nuestro objetivo», explicó. Buss hizo estas afirmaciones durante la visita que realiza a la isla para celebrar los 30 años de trabajo de Neckermann en Eivissa. También se refirió a la contratación de cara a la temporada baja y explicó que, aunque confía en que se siga aumentando la cifra de visitantes -este touroperador trajo a 7.000 el invierno pasado- la demanda sigue siendo demasiado baja.

El vicepresidente ejecutivo de Neckermann conoce el proyecto del Govern de implantar un impuesto turístico y, aunque no está en contra de este sistema para mejorar el medio ambiente, sí considera que se ha elegido una fórmula incorrecta para cobrarlo y que se ha hecho demasiada publicidad que puede tener efectos nocivos. «Hay que hacerlo con menos ruido. La gente que viene a Balears paga, de media, 1.400 marcos y la ecotasa les supondrá 28, no es nada. Pero en la cabeza de los clientes sí puede afectar», consideró.