El patrón de los agricultores, San Isidro, trajo ayer un regalo a todos los mayores de Sant Jordi: una nueva pista de petanca y una ampliación de su centro cultural, que ayer se encargaron de inaugurar el alcalde de Sant Josep, José Serra Escandell, y el conseller de la Funció Pública del Govern, Josep Maria Costa.

Las celebraciones en honor del santo de la gente del campo comenzaron a las once de la mañana con una misa solemne en la iglesia de Sant Jordi, que se llenó hasta los topes para la ocasión. De hecho, casi había tanta gente en el exterior "siguiendo el oficio religioso por los altavoces instalados en el porche" como en el interior. Tanto los que estaban dentro como los que se encontraban fuera tuvieron que soportar un intenso calor, que hizo trabajar a cien por hora a todos los abanicos. La celebración eucarística contó con la colaboración del coro de la Casa Cultural de Sant Jordi y Sant Francesc, que cantaron el angelus y otras piezas musicales religiosas.

Una vez acabado el oficio, todos los mayores marcharon en procesión hacia su club, donde las autoridades cortaron la cinta que servía para inaugurar la ampliación del local y la nueva pista de petanca. Por su parte, el párroco de Sant Jordi se encargó de bendecir los trabajos. El presupuesto total de estas obras asciende a 16 millones de pesetas, sufragados por el Consistorio de Sant Josep y la Conselleria de Presidència del Govern balear. Estas obras han permitido ampliar la capacidad de la Casa Cultural de Mayores en un buen número de mesas.

Una vez acabados todos los actos protocolarios, los socios de esta asociación de mayores se desplazaron hasta la Barbacoa Gala Night de Sant Antoni, donde se les invitó a una gran comida. De esta forma se cerraban las actividades festivas en honor a San Isidro, unas fiestas que, como en anteriores ediciones, han contado con un extenso programa de actividades tales como conferencias, meriendas populares y exhibiciones de gimnasia rítmica.