No podía ser de otra forma: una paella inaugurará el nuevo Casal Cultural Valenciano en Eivissa. Será en la localidad de Sant Antoni el próximo domingo al mediodía y con ello se pondrá fin a varios años de incertidumbre ya que los socios de la entidad utilizaban como sede el restaurante de uno de sus miembros para realizar las reuniones semanales y los actos festivos.

El tesón y el esfuerzo de todos ellos -ya que no han contado con apoyo institucional- ha hecho realidad este sueño que pone en marcha con más fuerza que nunca el esfuerzo común de cara a la inminente celebración de las fallas.

Una figura representativa del municipio, elaborada por el escultor Pedro Hormigo, se plantará el 23 de marzo y será quemada tres días después.
Las fechas se han elegido con el objetivo de no coincidir con las actividades diseñadas en Formentera, estas sí idénticas en el calendario a las valencianas, de forma que, tal y como señala Vicente Marqués, presidente de la asociación, «podamos asistir los dos grupos a cada uno de los eventos programados». Con todo ello los levantinos completan un año frenético en el que se han sucedidos los acontecimientos. Tras el paso de dos de sus miembros por una trobada internacional de Casas Valencianas en Argentina, junto al resto de comunidades repartidas por todo el mundo, ahora la apertura del local y la cremá -que probablemente contará con personalidades destacadas- marca una línea ascendente de difícil prolongación.