De izquierda a derecha, Mateu Tous y Joan Albert Segura, presidente y director, respectivamente Apotecaris Solidaris, ayer, durante la presentación de esta nueva campaña. Foto: VICENÇ FENOLLOSA.

Los farmacéuticos de Balears han constituido una Organización No Gubernamental (ONG), Apotecaris Solidaris, desde la que tratarán de ayudar al Tercer Mundo en el campo que ellos dominan: el de los medicamentos. Esta asociación humanitaria, creada durante el verano de 1994, tras los trágicos sucesos de Ruanda, presentó ayer en Eivissa una nueva campaña de recogida de medicinas que se desarrollará en la mayoría de farmacias de las Pitiüses, según comentó el presidente de esta organización, Mateu Tous, quien se reunió el pasado lunes, junto con el director de Apotecaris, Joan Albert Segura, con todos los boticarios de Eivissa y Formentera para exponerles su plan. Éste fue «muy bien recibido por la mayoría», como apunta Tous. Entre los países que reciben las partidas de medicinas procedentes de Balears se encuentran, entre muchos otros, Cuba, Ghana o Bosnia Herzegovina. La asociación acepta cualquier tipo de medicamentos, aunque los que más urgen son los de primera necesidad, como los antibióticos, los desinfectantes e incluso los analgésicos
Las previsiones de esta ONG apuntan que en las farmacias de las Pitiüses se recogerán una media de 2.500 kilos de medicamentos cada año. Sin embargo, de éstos, sólo un 80 por ciento se podrá transportar a los países que lo necesitan, puesto que el resto, o bien estará caducado o no pasará los estrictos controles que aplica la Organización Mundial de la Salud, como explica Tous.

A pesar de todo, éste no es el único objetivo de esta iniciativa que bien pronto comenzará a aplicarse en la mayoría de boticas, puesto que también contempla otra dimensión de protección medio ambiental: hasta la fecha, los medicamentos usados caducaban en la casa de los compradores, quienes acaban por lanzarlos a la basura con el consiguiente riesgo para el entorno, como explica el director de Apotecaris Solidaris. Ahora, todos los medicamentos que se tendrán que tirara pasarán un proceso de tratamiento que eliminará cualquier tipo de contaminación.