Las conselleries de Turisme y Treball del Govern balear están negociando cómo gestionar la futura Escuela de Hostelería de Eivissa, según informaron ayer fuentes de estos departamentos. Aunque el edificio en el que se están realizando las obras de esta Escuela pertenece a Treball, Turisme considera que la gestión no debería quedar únicamente en manos de esta Conselleria, puesto que este centro tiene que servir para formar profesionales de la restauración que nutran al sector turístico. Estas negociaciones están momentáneamente estancadas a la espera de que el consell de govern apruebe mañana un decreto sobre formación, en el que se establecerán las bases de los centros educativos que pertenecen a la Conselleria de Treball i Formación que dirige Eberhard Grosske.

Otra de las novedades que tiene intención de introducir el Govern es la de abrir este debate sobre cuál debe ser el modelo de la futura Escuela de Hostelería a la participación de las instituciones de las Pitiüses. En concreto, se habla de consultar con el Consell Insular, el Ayuntamiento de Eivissa, las organizaciones empresariales y las sindicales. «El objetivo es que se estudie el diseño de las actividades que debe acoger la Escuela de Hostelería y que todos los sectores implicados puedan participar», indicó ayer personal del departamento de Treball, que reconoció que desde la Conselleria de Turisme se ha manifestado un gran interés por participar en la gestión de este centro de formación.