Momento en que Mariano Rajoy impone a Pere A. Serra la importante distinción. Foto: TOMÀS MONSERRAT.

El acto de concesión de la Gran Cruz de Alfonso X el Sabio se inició con las palabras de la jefa de Protocolo del Ministerio de Educación y Cultura, que leyó la orden de concesión acordada en Consejo de Ministros y firmada por SM el Rey.

Sobre el estrado, además del ministro de Educación y Cultura y el homenajeado, estaban las principales autoridades de Balears: Francesc Antich, president del Govern; Maria Antònia Munar, presidenta del Consell de Mallorca; Joan Fageda, alcalde de Palma; Catalina Cirer, delegada del Gobierno, y Maximilià Morales, presidente del Parlament. A continuación, Mariano Rajoy colocó a Pere A. Serra una banda y la Gran Cruz de Alfonso X el Sabio, un acto que fue respondido por los asistentes que abarrotaban el edificio gótico con un cerrado aplauso.

Acto seguido fue el turno de los parlamentos. El primero en hablar fue Mariano Rajoy. Empezó refiriéndose a la figura del monarca Alfonso X el Sabio, un hombre cuya «actividad política y cultural trascendió las fronteras de su reino», dijo. A continuación loó la labor de Pere A. Serra. «Pocos mallorquines han contribuido tanto como él a la promoción y conocimiento de estas islas, de su historia, de su lengua, de su geografía, de sus costumbres y de su patrimonio artístico. Aunque sólo fuera por haber dirigido la 'Gran Enciclopèdia de Mallorca', ya merecería un puesto de honor entre quienes han dedicado sus esfuerzos a promover la cultura», declaró. También recordó el esfuerzo realizado por el homenajeado para sacar adelante el Museu d'Art Modern i Contemporani, «la ilusión más grande de su vida».

A continuación tomó la palabra Pere A. Serra. Dijo que ni en sus sueños más alocados de infancia podía imaginar recibir una distinción como ésta. También tuvo un recuerdo para todos sus amigos y colaboradores, en especial Miquel Dolç, Josep Mascaró Pasarius y Paulí Buchens, que ya no están entre nosotros. Y afirmó: «En este momento me gustaría recordar que, al saber que me habían concedido esta distinción, hice público mi convencimiento de que quien la merece es el conjunto de personas que trabajan en el Grup Serra».

Pere A. Serra destacó la importancia cultural de la Mallorca medieval y se preguntó qué ha pasado para que esta fuerza se haya perdido como una estrella fugaz. En este sentido afirmó que «es el momento de pedir a los que han demostrado tanta habilidad para acumular poder económico que lo sepan convertir en auténtico progreso: y no hay progreso si no se activa la cultura como eje del desarrollo social. Me pregunto cuándo llegará el momento en que las jóvenes generaciones podrán sentirse orgullosas de sus progenitores, como nosotros nos podemos sentir orgullosos de unos antepasados lejanos que levantaron los monumentos culturales que nos han inserido en la Historia en mayúsculas».