Cada vez se aprecian por la calle más síntomas de Navidad. Esta sensación se multiplica paseando por Vara de Rey de Eivissa, que este año se ha convertido en el verdadero centro estas fiestas. Ayer, por ejemplo, se inauguró el tradicional mercadillo de artesanía, que se suma al otro mercado de productos navideños que abrió sus puertas el pasado día 4. Tan sólo unos metros separan uno de otro.
Este mercadillo de artesanía se ha consolidado, en unos pocos años, como una de las mejores ofertas a la hora de comprar la multitud de regalos que debemos hacer por estas fechas. En unos cuantos metros se concentra una variadísima oferta de productos y con una amplia gama de precios.
Entre otros, destaca la abundancia de puestos que ofrecen plata muy barata o bisutería. Otros artículos de artesanía "como los gorros de lana, los cinturones de cuero o cristales pintados" ocupan también buena parte del espacio de esta feria.
A pesar de todo, no todos los puestos instalados "más de 20" abrieron ayer sus puertas, sino que esperan hacerlo en los próximos días. Los vendedores han pagado 12.000 pesetas al Ayuntamiento para participar en el mercadillo, más las 15.000 que cuestan el resto de gastos, como la luz. Sin embargo, el desembolso importante fue el que efectuaron el año pasado, cuando compraron los puestos de madera que utilizan, que cuestan 60.000 pesetas. Eso sí, confían en tener unas buenas ventas.
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