El Colegio de Médicos de Balears tendrá que aplazar las obras de la nueva sede en Eivissa por su proximidad al área protegida en Puig des Molins donde se celebra la popular sa berenada, un hecho que determinó la suspensión de licencias municipales, incluida la del Colegio de Médicos, en esa zona hasta que se realice un reordenamiento en la zona.

El presidente de la Junta Insular de Eivissa del Colegio de Médicos de Balears, Francisco Gracia, y la doctora María Angeles Lecineña se entrevistaron esta semana con el alcalde de Eivissa, Xico Tarrés, para abordar este asunto y se dejó claro que «la voluntad de la alcaldía es dar la licencia», indicó Gracia. El colectivo quiere acometer las obras cuanto antes de la nueva sede por el interés científico y formativo, ya que dispondrá de un sistema de videoconferencia que permitirá que «todas las sesiones clínicas que se hagan en el Colegio de Palma se puedan ver desde aquí».

La intención era empezar las obras antes de que acabara este año, pero se tendrán que retrasar hasta enero cuando se acometa el reordenamiento de la zona. El presidente del Colegio de Médicos de Balears, Miguel Triola, se desplazó ayer a Eivissa para ofrecer a los médicos una asamblea informativa de carácter preparatorio a la reunión general que tendrá lugar el 1 de diciembre en la sede del Colegio de Palma. Los presupuestos generales para el 2000, el decreto de acceso al título de especialista de los Mestos, y la toma de postura sobre las fundaciones fueron algunos de los temas que abordó Triola en la asamblea.