Cara a cara con la realidad del Sahara

El pasado verano llegaron a las Pitiüses una delegación formada por casi 40 niños y niñas saharauis. Aquí, convivieron dos meses con familias de Eivissa y Formentera, gracias a la iniciativa organizada por la Associació d'Amics del Poble Saharàui, que trataba de alegrar un poco más la vida a los pequeños, procedentes de un país en el que los conflictos políticos están a la orden del día. Ahora, ha llegado el momento de devolver la visita, así que 20 miembros de esta organización humanitaria "en su mayoría, personas que acogieron a los pequeños" partirán el próximo día 2 con destino a Tinduf para comprobar de primera mano las condiciones en la que viven allí «sus» pequeños, como explica la coordinador de la asociación, Loreto Mayol.