Los novios, frente al alcalde y bajo la atenta mirada de José Antonio Camacho. Foto: GERMÁN G. LAMA

El legendario futbolista del Real Madrid, José de Felipe, contrajo ayer matrimonio con Larisa García, una guapa cubana, en el Ayuntamiento de Eivissa. El enlace contó con un testigo de excepción, el seleccionador nacional de fútbol, José Antonio Camacho, y una amplia lista de invitados VIPs, entre los que destacaba la presencia del histórico del socialismo felipista, Txiqui Benegas, el ministro de Asuntos Exteriores, Abel Matutes, el doce veces más una campeón del mundo de motociclismo, Angel Nieto, y el representante del cantante Julio Iglesias, Rafa Lozano.

De hecho, la presencia de nuestro cantante más internacional era uno de los alicientes de esta boda, ya que le habían pedido que fuera el padrino. Sin embargo, a las once de la noche, Iglesias no había hecho acto de presencia. Quien sí asistió a la boda fue Massiel, quien protagonizó una de las anécdotas de la jornada, al perderse de camino al Ayuntamiento de Eivissa: «Yo iba por el mismo camino que a la boda de Matutes», explicó.

La cena se ofreció en el restaurante Malibú. Antes que nada, se sirvieron unos canapés (salmón, uvas con paté y jamón serrano, entre otros) regados con copas de Moët-Chandon. El enlace se convirtió, como no, en una fiesta de futbolistas. El empate del Madrid en el campo del Málaga fue el tema de la noche. Camacho, a la primera que pudo, se escapó hasta el televisor más cercano para seguir la jornada. Mientras, el ex presidente del Valencia, Paco Roig, departía con los invitados.