A un día de que el verano toque a su fin, la mayoría de las torres de vigilancia de las playas ibicencas no han sido todavía habilitadas para que los socorristas puedan utilizarlas. La Asociación de Concesionarios de Playas, que preside el empresario César Jerez, ha hecho oír sus quejas por el «estado lamentable» en que se encuentran estas instalaciones. «Se montaron estas torres y se gastó un dineral para que, dos años después, las tengan abandonadas y que dan risa», señaló Jerez. «Esto no debería estar así.

Después de la inversión que se hizo, resulta impresentable que no haya servido para nada, porque la mayoría de las torres no han podido ser utilizadas este verano», añadió el presidente de la Asociación de Concesionarios de Playas. También la Cruz Roja, que presta el servicio de vigilancia en el litoral ibicenco, se ha quejado por el estado de estas instalaciones, que en todo el verano no han podido ser utilizadas por los socorristas.

Otro de los problemas que vienen denunciando desde hace tiempo los concesionarios es la falta de arena en las playas, «sobre todo este verano, que en el paso marítimo de Sant Antoni ha estado fatal, porque echaron arena de cantera y quedó todo asqueroso», afirmó Jerez. Los concesionarios pedirán una reunión con el nuevo presidente del Govern, Francesc Antich, para pedirle su apoyo.