Según Portas, vista la actitud de Córdoba, su dimisión será «difícil», por lo que sólo queda negociar con la oposición una moción de censura.
En declaraciones a Europa Press, Portas ha reiterado que la situación «no está bien» porque Córdoba «no entra en razón y sigue contando su versión de la película y lo preocupante es que cada vez se cree más el papel que está interpretando».
Además, ha indicado que finalmente este lunes no tuvo lugar la reunión entre los consellers de Sa Unió y los grupos de oposición, por lo que el encuentro probablemente se celebrará este martes.
En cuanto a la reunión entre Córdoba y los consellers, incluidos los de la oposición, Portas ha explicado que el presidente aseguró que tenía pruebas físicas de su inocencia, se limitó a repetir lo publicado en prensa y lo que ya había manifestado anteriormente. «No aportó pruebas y sólo leyó dos Whatsapps que tenía y que no aportaban nada nuevo», ha declarado Portas.
El conseller de Sa Unió ha afirmado que «la oposición lo tiene claro» y probablemente considere que «no son nada convincentes» las explicaciones de Córdoba, aunque entiende que, para presentar una moción de censura contra un presidente, la oposición exija «algo más» que la palabra de ocho consellers contra uno.
«Tenemos algo más y está en manos del abogado. En cuanto nos deje mostrarlo a la oposición, así lo haremos. Cuanto antes mejor e intentaremos ser lo más ágiles posibles en este tema», ha reiterado.
Sobre las palabras de Córdoba afirmando que ciertas personas habían provocado esta situación al tener interés en tomar el poder en el Consell, Portas ha desmentido estas acusaciones asegurando que «es preocupante porque el presidente está delirando» y mezcla «lo que piensa y lo que dice y cosas que imagina».
Desde Sa Unió han expresado su apoyo a los dos consellers a quienes Córdoba ha pedido la dimisión «porque vamos todos a una». «No nos hará dimitir e intentaremos encontrar la estabilidad para esta casa cuanto antes», ha dicho Portas.
También ha afirmado que en la reunión del lunes el presidente sí exigió el cese de los dos consellers si éstos no presentaban la dimisión, dándoles 60 minutos para ello.
«Han pasado dos semanas de este show mediático que él ha creado y ahora ya se está creyendo esta película y es preocupante, aunque la verdad es otra. Por ello, hay ocho consellers que le dicen que se ha equivocado y que dé un paso atrás», ha reiterado.