Cine en Cala d’Hort para concienciar en la lucha contra el cáncer

Este miércoles han comenzado el rodaje de una producción que, en palabras de su director, pretende ser un homenaje tanto para los enfermos de cáncer como para todos aquellos profesionales que están presentes día a día en el campo de la investigación de dicha enfermedad. «Es un cortometraje que vamos a hacer para dar visibilidad a la investigación contra el cáncer. Está inspirada especialmente en mi último libro, Última luz del día», explica Martos, que, a pesar de ser su segundo cortometraje, considera que este es su «proyecto más importante» y en el que está invirtiendo todo «su esfuerzo y tiempo». «Normalmente siempre se le da visibilidad a este sector a través de la ciencia pero considero que el cine es capaz de emocionar y sensibilizar a la gente», puntualizó el director que ya piensa en presentar el corto en festivales nacionales. Tal y como apuntó Martos, la elección de Cala d’Hort como escenario no ha sido casual. El imponente es Vedrà y su conocido magnetismo juegan un papel fundamental en la trama de El Diario de Ana.

En este sentido, la historia gira en torno a tres personajes principales. Bárbara Hermosilla interpreta a Ana, una joven enferma de cáncer que afronta la vida con una perspectiva optimista, mientras que Belinda Washington encarna a una investigadora científica involucrada en la lucha contra la enfermedad. Eduardo Rosa da vida a Samuel, un joven también enfermo que, a través de su relación amorosa con Ana, explora sus propias luces y sombras en medio de la adversidad.

«Es un reto como actriz este personaje, es muy complejo», comentó Bárbara Hermosilla sobre su papel protagonista encarnando a Ana. La actriz se encuentra investigando a fondo sobre el glioblastoma, un tipo de tumor cerebral extremadamente agresivo. «Estoy trabajando ya en buscar información sobre los enfermos de cáncer de tumor cerebral, uno de los más mortíferos», explicó Hermosilla, mostrando su compromiso para dar vida a este personaje desde una perspectiva auténtica y profunda.

Por su parte, Eduardo Rosa, quien recientemente protagonizó la película El Aspirante, resalta la complejidad emocional de su personaje, Samuel. «Lo humanizo. Samuel, aunque es una persona excepcional y que está pasando por un problema muy importante, tiene sus luces y sombras, como cualquier persona. Lo que está claro es que alguien que pasa por un cáncer siendo joven, no se desarrolla igual que otro chico de su edad», explicó Rosa, que asegura que para darle vida a Samuel, y a otros personajes, trabaja mediante la técnica Le Coq, un método interpretativo que le permite abordar el papel de forma sensorial. Asimismo, Rosa asegura que algo a destacar del film es que no se centra únicamente en la enfermedad, sino que el amor está muy presente durante toda la historia.

«Samuel es vulnerable y tiene un enorme amor por Ana. El cortometraje habla del cáncer pero es una historia que usa el amor como vehículo esperanzador. El cáncer es solo el contexto», añadió el actor español.

Este proyecto continuará en la Policlínica Nuestra Señora del Rosario en diciembre, donde se rodará el grueso de un cortometraje que promete ser una historia esperanzadora y llena de residencia, humanidad y amor.