Los encuentros que mantuvieron el alcalde Rafa Triguero con los vecinos de Ca n’Escandell y la alcaldesa Carmen Ferrer con los comerciantes de Santa Eulària son dos ejemplos claros de transparencia, diálogo y pluralidad democrática. Ambos se pusieron a disposición de sus vecinos, escucharon quejas, críticas a su gestión y tomaron nota de sus inquietudes y necesidades. Los ayuntamientos son las administraciones más cercanas al ciudadano y encuentros vecinales como los de esta semana en Vila y la Villa del Río ayudan a reforzar la idea de que los políticos están para escuchar y ayudar a los vecinos.
La garita de la plaza de sa Torre, ejemplo de exceso de burocracia y lío entre administraciones
Los vecinos del puerto de Ibiza llevan años alertando del mal estado de la garita de la plaza de sa Torre, que actualmente presenta tales boquetes que podría intuirse que está cerca del desplome. Y es que la última vez que se rehabilitó fue en 1995. Vila y Consell ya aclararon que ellos no son responsables de esta garita. APB, por su parte, descolgó toda la responsabilidad en Defensa pese a estar en zona portuaria y, ahora, Defensa dice que en 2016 pasó a formar parte del Ministerio de Agricultura. Un lío competencial cuyo resultado es que esta torre está a punto de caerse a trozos.
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