Las vacunas contra la COVID-19 han supuesto un auténtico revulsivo en la pandemia y han evitado una catástrofe. Con los contagios totalmente disparados, las unidades de críticos serían totalmente insuficientes para atender a todos los contagiados que necesitasen ingresar en ellas. Las vacunas previenen los contagios, pero especialmente evitan que las personas que se infecten lo hagan de una manera grave. El 70 % de los ocupantes de las UCI no están inoculados y la mayoría de los que sí lo están tienen comorbilidades.
Las bajas laborales por contagios amenazan la reactivación económica
Justo cuando las empresas baleares están aumentado las contrataciones -logrando con ello el mayor descenso de España en las cifras de desempleo- la multiplicación de las bajas laborales por contagios de Covid atenaza la recuperación económica. Algunas empresas registraron en diciembre casi la mitad de bajas de todo el año. Con un tejido empresarial conformado en gran medida por micropymes la acumulación de casos puede ser mortal de necesidad. Máxime cuando se espera que sigan los repuntes en enero fruto de las reuniones navideñas.
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