Ayuso monopoliza el debate.
La incuestionable victoria de la presidenta madrileña en las pasadas elecciones autonómicas ha hecho que todas las miradas se giren hacia ella y que todo se compare con la líder del PP de Madrid. La inevitable comparación ha llegado también a la candidata popular de Baleares, Marga Prohens, que en sus primeras declaraciones ya ha tenido que dejar claro que una cosa es Ayuso y otra, ella. Baleares no es Madrid y Prohens tampoco es Ayuso, aunque recurra a alguna de sus estrategias para conseguir presencia política en las Islas.
Vuelven los críticos al PP.
La asistencia de los críticos de Calvià, con Pedro Porcel Moner a la cabeza, y de Estefanía Gonzalvo, portavoz de los populares en Andratx, a la presentación de la candidatura de Prohens habla por sí sola.
Elegante Company en la despedida.
Lejos de la bronca y los reproches que han caracterizado otras intervenciones en el Parlament, el todavía presidente del PP balear, Biel Company, optó por una despedida elegante, marcada por la emoción y que no denotó ningún tipo de rencor. Admitió que si hacer oposición era difícil en algunas circunstancias, también lo era gobernar. Y eso se lo dijo a la presidenta sin ocultar que pese a desearle éxitos en su gestión, esperaba que dejara el Consolat de Mar. Pidió perdón y dijo que perdonaba. Todo el Pleno le aplaudió. El PP se puso en pie.
Suena Éric Jareño.
El alcalde de Llucmajor, Éric Jareño, suena como secretario general de Marga Prohens. El actual, Toni Fuster, no parece, pues, que vaya a seguir.
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