He tenido la oportunidad de asistir a varias comisiones de investigación y es cierto que se sacan pocas novedades, sobre todo cuando los asuntos están judicializados. Está claro que objetivo es dañar al rival político, que por otra parte es lo que ocurre a diario en el Parlament. En las comisiones no se puede mentir porque se puede incurrir en un delito que conlleva una condena de cárcel. No es una broma.
Imagino que cuando los partidos que tienen la mayoría en el Parlament impulsaron una comisión de investigación sobre las mascarillas fake era para conocer la verdad y para ello se hace un listado de personas que puedan aportar alguna novedad.
Recordemos que en una de las comisiones de investigación se llegó a tomar declaración a Jaume Matas desde la cárcel para hablar sobre la financiación ilegal del PP nacional. Imagino que el PSOE no lo citó para hacer daño a Matas, que ya se encontraba en prisión por otra causa.
Este viernes estuvo en el Parlament Francina Armengol, presidenta del Govern cuando la administración de la que ella era responsable fue estafada por una trama socialista con 3,7 millones de euros en material sanitario defectuoso. Eso lo dice la Fiscalía y la UCO, no el PP, ni Vox, ni Manos Limpias. Y también dice la UCO que al frente de esta trama estaba un ex asesor de José Luis Abalos. Eso lo sabe hasta Armengol.
Sin embargo, Armengol, la estafada, llegó al Parlament para cuestionar el papel de la oposición hasta el punto de cuestionar sus preguntas, lo que saben del expediente de la estafa, y de la actual presidenta del Govern.
Realmente ahora mismo da igual el tipo de mascarillas, cómo llegaron a Balears, de donde vinieron y donde están en la actualidad. Mucho se ha hablado de ello y son detalles que después de hablar durante meses ya interesan bastante poco. Lo que está claro que el ‘caso mascarillas’ no es ningún bulo ni una fake news, como tampoco lo es la investigación a la mujer de Sánchez. La instrucción judicial va avanzando y la Fiscalía Europeo ha solicitado asumir toda la causa.
Cuando un responsable político acude al Parlament se exige un mínimo de humidad, sobre todo cuando lo que debería hacer es pedir disculpas a los ciudadanos de Balears por su mala gestión en la compra de material sanitario, como ya advirtió la añorada Oficina Anticorrupción de Balears en un informe que parece que algunos diputados de la comisión de investigación aún no han leído.
El informe, recordemos, ya advertía que la empresa de Koldo y sus amigos era sospechosa porque no tenía ninguna experiencia en material sanitario. Y recordaba que sus responsables habían estado implicados en otra trama delictiva. Eso lo decía la Oficina Anticorrupción creada por Armengol y sus socios hace tres legislaturas.
El tiempo determinará responsabilidades penales y conociendo cómo actúa la Fiscalía es improbable que se llegue a impulsar a Armengol en la trama de las mascarillas, pero al menos asuman que fueron estafados y que los ciudadanos de Balears han perdido 3,7 millones para beneficiar a una trama del PSOE. Todo lo demás para intentar desviar la atención sobre la estafa de las mascarillas sí que es fango, del que algunos ya lo tienen hasta el cuello.