Podemos darle mil vueltas, pero los británicos han veraneado en Ibiza más que nunca, por lo tanto no podemos afirmar que el proceso abierto para la salida del Reino Unido de la Unión Europea haya afectado negativamente. Al menos de momento. Más bien lo contrario, según datos que me facilita Juanjo Riera, Federación de los Hoteleros, han aumentado un 9,47% con respecto al año anterior. Casi un diez por ciento. Son palabras mayores. En el acumulado desde enero a julio, el aumento roza el 11%.

El mercado italiano también sube, mientras que el alemán vuelve a descender. Los italianos, ya es sabido, son el primer mercado de Formentera. Hace años que lo digo: los alemanes nos la tienen jurada y puede haber algún repunte puntual, pero a la larga, las Pitiusas están perdiendo el turismo germano. Y no me gusta la idea. Los holandeses siguen premiando Ibiza, así como los franceses (un aumento del 10%). Después ya sigue el turismo suizo, el sexto en importancia en las Pitiusas.

Es pronto para cantar victoria con respecto a los ingleses. Todos lo sabemos: van a pasar cosas y no serán todas agradables. Si su libra sigue perdiendo, Ibiza, Baleares, España lo notarán. Recordemos que no pertenecen al euro y que desde el día del referéndum, se ha depreciado un 15%. No es moco de pavo para el tipo de turistas que viene, de un poder adquisitivo discreto, en general. Para un británico, las vacaciones no son un lujo, sirven para recargarse de sol y vitamina D para todo el año. Ahora el pound/libra están en mínimos desde 2009. Veremos cómo evoluciona después de Navidad, que es cuando compran sus vacaciones.
@MarianoPlanells