Llevo un par de días en los que no puedo quitarme de la cabeza la famosa máxima del celebérrimo ingeniero aeronáutico, al respecto de que todo lo que puede ir mal, irá mal y tras darle vueltas al tema, estoy casi seguro de que el tal Murphy debe ser vecino de Formentera.
Imaginar la escena, un cargo de confianza, un hombre entregado a su labor, abnegado y preocupado por ofrecer a sus paisanos lo mejor, de lo mejor, de lo mejor, de amortizar cada euro que con mucho esfuerzo, cual hormiguitas de una fábula de Esopo han aportado las buenas gentes de la menor de las Pitiusas, un héroe del pueblo, que digo héroe… el puto amo!!! Pues ese prócer, tiene que tomar importantes decisiones sobre el desarrollo futuro de su amada isla y como gestor ejemplar que es, decide encargar el pertinente estudio (pues como todo el mundo sabe o debería saber, los estudios de todo tipo, y alrededores, son la principal función de todo buen cargo de confianza que se precie) y en aras de una total ejemplaridad a la hora de elegir la empresa encargada de tan titánica tarea, opta por buscarla fuera de su isla, para alejar en lo posible cualquier atisbo de nepotismo y no contento con ello la busca más allá de su isla vecina (Ibiza), más allá de su comunidad autónoma (Baleares), más allá (ya os he dicho que es el puto amo) incluso, de su propio país (España), hasta llegar allí donde nadie ha llegado… HOLANDA!!!
Y ahí descubrimos a nuestro titán, caminando ufano por una céntrica calle de Rotterdam, todo dichoso, sabedor de que el esfuerzo valdrá la pena. Me lo imagino hasta silbando o tarareando alguna cancioncilla, de pura felicidad, entrando en la sede de una empresa de gran prestigio en el mundo de los estudios, que hasta la misma luna osan estudiar (vamos, otros putos amos) y al abrir la puerta…. SE DA DE BRUCES CON SU CUÑADO QUE RESULTA QUE TRABAJA ALLÍ!!! Pálido, con el rostro desencajado y los ojos saliéndosele de sus órbitas, retrocede con un dramatismo Shakesperiano, convencido de que solo la mayor de las fatalidades ha propiciado el nefasto desenlace… le falta el aire, todo le da vueltas, quiere, necesita!, salir de allí a toda costa, impulsivo abre una puerta y… SE ENCUENTRA CON SU PROPIA HERMANA QUE TAMBIÉN TRABAJA EN ESA EMPRESA!!! Aquello ya es más de lo que su honesta mente puede soportar, y al caer desmayado sólo puede pensar en el maldito Murphy y su famosa ley. Al despertar y sin duda motivado por el shock, nuestro hombre (es que un shock te humaniza mucho) no puede evitar llegar a un acuerdo comercial con los susodichos aún y sabiendas de las especiales circunstancias familiares que allí concurren. Y digo lo del shock por no decir lo que realmente pienso…que a este santo le pusieron burundanga en la bebida!!! Vamos, que no lo violaron de puro milagro!!!
Y así y sólo así, amigos y amigas, se pueden explicar los hechos acontecidos, y todos ellos se resumen en una frase “la culpa es de Murphy y su maldita mala suerte”.
P.D. y esto nos deja ante dos alternativas amigo Isidor. Una, la historia sucedió tal como yo la cuento o dos… TU TE HAS PENSADO QUE SOMOS GILIPOLLAS?!!!
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