OPINIÓN| José Luis Parajuá

El haraquiri saludable

José Luis ParajuaEivissa10/07/14 0:00

Hace unos días señalaba en otro artículo la importancia que tienen los gestores políticos en conseguir el dinero preciso para mantener la sanidad y los servicios sociales. Algo que sin duda nos afecta a todos. En el año 2050, seremos el tercer país mas envejecido. Los temores que semejante predicción nos suscitan nacen de lo acaecido en la reciente crisis global: los pagadores han sido los asalariados, aquellos con un sueldo conocido, y los pensionistas. Con la excusa de mantener las pensiones, éstas, en realidad, se van recortando de tal manera que, si tienes la mala suerte de ser longevo, tu precariedad se iguala a tu energía, que no hace falta medirla. Se argumentará que los recursos son limitados, pero lo que es de verdad limitada es la capacidad de los políticos para entender que el desencanto de los ciudadanos, manifestado en una abstención elevada en las votaciones y en unos votos dirigidos a formaciones de cuyo contenido ideológico se desconoce todo, excepto que sugieren una alternativa a lo ya conocido. Ya no importan tanto lo que digan, sino que no sean los de siempre.

Debería hacer pensar a los partidos políticos tradicionales que el modelo ya no responde a nuestras necesidades. Se han convertido en empresas cuyos beneficiarios son los afiliados y no toda la población. Como errar es humano y nuestros elegidos ya lo han demostrado suficientemente, les hago una propuesta sencilla, minimícense. Quiero decir que los puestos ocupados por políticos profesionales sean unos pocos. Dejen el resto de los cargos para técnicos. Háganse unas pocas preguntas. ¿Como es posible que en una sociedad tan tecnificada, que se exige un titulo para todo, solo en política, alguien pueda ocupar un cargo con el único bagaje de su buena voluntad por muy altruista que sea? Entreténganse en evaluar el periplo de alguno de los políticos que nos rodean, que, por su pluripotencialidad, su capacidad de transformación supera a las famosas células madre. ¿Cuanta gente seguiría afiliada si no tuviera la posibilidad de obtener algún cargo o beneficio si su partido llega al poder? La permanencia de un cuerpo de técnicos en la mayoría de las concejalías permitiría una mayor continuidad en su desempeño y un mayor control impidiendo los despilfarros del iluminado de turno. Hablando de Ibiza, no creen que es el momento de unificar todos los ayuntamientos suprimiendo tantas posibles duplicidades. No solo seriamos mas eficaces sino mucho mas económicos.

El excedente inviértanlo en los servicios sociales. Se que les estoy pidiendo a los partidos que se hagan el haraquiri, pero me hago mayor, y voy a precisar unas estructuras que no me van a poder dar por mucho que haya cotizado. Ya se que los recortes los hacen por nuestro bien, pues aplíquense su política. Ya lo decía el Sr. Aznar, ¡váyanse, señores políticos! Además, si ya lo hicieron las cortes franquistas, como no lo harán los demócratas. Perdónenme, debe ser la canícula, me provoca crisis de ingenuidad.