Las bicicletas son para el verano...

No es cuestión de gustos, es cuestión de racionalidad, de buscar entornos menos deshumanizados en unas islas maravillosas. Con una política real de promoción de este medio de transporte ganaríamos en autonomía para niños y jóvenes, evitaríamos sedentarismo, tráfico, ruido, gasto familiar innecesario, contaminación y consumo energético. ¿Hay mejor protesta contra las prospecciones petrolíferas que gastar menos gasolina? Lo contrario no me cuadra.

Amigos mal pensados me dicen que no conviene potenciar la bicicleta, que hay a quien interesa más vender gasolina o alquilar coches. No quiero creer eso. Otros me dicen que lo del carril bici es una inversión y no estamos para esos gastos. Me lo ponen "a huevo"...¿se acuerdan de la reforma de la Avda. de España? ¡qué oportunidad perdida! ¿Y el dispendio en las "autovías"? Sin entrar en el debate sobre su conveniencia o no, lo cierto es que no se aprovechó la oportunidad para ofrecer alternativas al transporte en automóvil. Al contrario, se ha obligado aún más a coger el coche para todo. En Vila tenemos un doble cinturón que encorseta a la ciudad. Ahí sí que te la juegas.

Y yo me digo que lo que nos falta es esa cultura de otros lugares, del centro y norte de Europa. Ves ejecutivos en su bici, mamás y papás con los niños, ancianas...incluso nevando. Carriles bici que abarcan las principales vías urbanas y un tráfico de automóviles escaso para grandes ciudades como Amsterdam, dan envidia. Y esa cultura que nos falta empieza en los ciudadanos de a pié, del cual son reflejo muy potenciado los políticos (como en tantas otras cosas). A unos y otros, ahora que llegó el verano, supongo que les espantará tanto como a mí ver este tráfico desmedido. Por eso les digo ¿y si apostamos por la bici? Yo aquí, sí me la jugaría...¿y ustedes?

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