Los casos activos y nuevos contagios siguen a la baja en las Pitiusas. En las últimas 24 horas se detectaron seis nuevos positivos y continúa el descenso de los casos activos hasta los 1.237, un 7% menos que la jornada precedente. En paralelo, el único hospital público de Ibiza ha empezado su particular desescalada y ya se están recuperando espacios en Medicina Interna para otros pacientes que no sean covid. También se han empezado a retomar las operaciones quirúrgicas, una buena noticia para quienes llevan semanas o meses esperando a ser intervenidos. Los datos reflejan que esta quinta ola se ha estabilizado, ha entrado en fase de ‘meseta', y continúa bajando, aunque más lentamente que en el resto de Islas.
Presión hospitalaria.
Si bien es cierto que se están reduciendo los contagios y que caen los casos activos, no hay que perder de vista que hay 54 personas con coronavirus que todavía están ingresadas pasando el virus. En la UCI de Can Misses hay actualmente ocho pacientes y no hay que olvidar que todavía tres personas ibicencas están en las unidades de críticos de Mallorca. Por tanto, no hay que lanzar las campanas al vuelo y dar por concluida esta quinta ola de coronavirus en Ibiza y Formentera ya que la frontera entre la normalidad y el colapso es muy difusa y se puede pasar de un extremo a otro en muy poco tiempo, tal y como se demostró tras las Navidades o, sin ir más lejos, entre este pasado mes de julio y agosto.
Precaución.
La realidad sanitaria en las Pitiusas es que Ibiza únicamente tiene dos hospitales, uno público y otro privado, y Formentera tiene un único hospital público en el que no se ingresan pacientes covid. A esto se suma el déficit histórico de personal sanitario de todo tipo que tienen tanto Ibiza como Formentera. Una falta de profesionales sanitarios que se ha vuelto a notar este verano, que han vuelto a denunciar los sindicatos y a la que, una vez más, no se ha puesto remedio. Con más de año y medio de pandemia de coronavirus, ya existe cierta experiencia en cómo se comporta este virus. Por ello, la Conselleria balear de Salud debe tomar nota de qué ha pasado en los últimos meses para evitar que se vuelvan a repetir las situaciones de colapso hospitalario y ello pasa, entre otras soluciones, por contratar a más personal y fidelizar al ya existente.
