No parece que la decisión del Consell d'Eivissa de convertir Cas Serres en una residencia sanitaria haya calmado los ánimos del personal del centro, que llevan muchos meses cuestionando la mala gestión y, sobre todo, critican el papel que está desempeñando la consellera de Benestar Social, Lydia Jurado, máxima responsable política de la instalación. Los trabajadores rechazan el cambio de hospital a residencia sanitaria porque creen que les afectará negativamente. Y no solo critican el fondo del asunto, sino también las formas porque se les aseguró que tal cosa no sucedería. Los empleados del centro dicen que se les había garantizado la renovación de la licencia hospitalaria, pero no ha sido así. Ahora, anuncian movilizacionesporque temen que se externalicen servicios, la entrada de personal no sanitario o incluso la privatización del centro.
Editorial
Cas Serres: crece la desconfianza
Ibiza07/04/18 4:01
También en Opinión
- Plazas libres en dos de los destinos más deseados del Imserso
- La bebida que cada vez se bebe menos y ayuda a reducir el colesterol
- Así serán los lujosos pisos que Salt Bae está construyendo en Ibiza
- «Mi abuela sacó el negocio sola y con cinco hijos a su cargo»
- «No sé si será el club más grande del mundo, pero sí el más espectacular»
Sin comentarios
Para comentar es necesario estar registrado en Periódico de Ibiza y Formentera
De momento no hay comentarios.