A pesar del éxito que tuvo el lanzamiento de esta crema para conseguir un aumento del pecho sin tener que recurrir a la cirugía, en la empresa valenciana tomaron la decisión de parar la fabricación de la misma, pues se dieron cuenta que para ser líderes en el mercado necesitaban una campaña de marketing realmente potente que no fuera única y exclusivamente la creación de una página de Facebook, implicando esto unos costes de publicidad que no eran compatibles con el precio de venta de dicha crea.
Tras el cese de la fabricación de Breaster, la página de Facebook de la crema se mantuvo abierta, en ella se podía ver cómo los usuarios y fans de la marca pedían fervientemente que volvieran a fabricarla pues los resultados habían sido todo un éxito, el problema seguía siendo el alto coste de producción y el poco margen de beneficios.
Todo esto cambió con la llegada del 2020, es justo en este año que la empresa tomó la decisión de volver a comercializar esta crema, pero para ello tenían que mejorar el margen de beneficios. La idea era muy sencilla, encontrar una composición que tuviera un coste menor pero en la cual los principios activos estuvieran basados en componentes 100% naturales. Tras un periodo de estudio y ensayos en laboratorios, siguiendo por supuesto todos los protocolos indicados para lanzar un nuevo cosmético al mercado, consiguieron obtener la crema que buscaban, no obstante con el tiempo descubrirían más usos para esta loción reafirmante de pecho pues poco después de lanzarla nuevamente verían que servía también como crema anticelulítica y muchos más usos.
Para entender mejor como una crema diseñada para aumentar y reafirmar los pechos acaba siendo todo un milagro cosmético, hay que situarse al principio del lanzamiento. En un mundo tan digitalizado y lleno de redes sociales, no es de extrañar que miles de influencers quieran probar cada día nuevos productos para ver si han encontrado el santo grial de la belleza, pudiendo desvelar el secreto mejor guardado a sus seguidores, justo esto es lo que le pasó a una influencer concreta. Esta chica consiguió una muestra de la crema, tras usarla en sus pechos y ver los resultados pensó que quizá podría usarla también en sus labios, obteniendo de esta forma el mismo efecto reafirmante y de volumen extra, ante esta duda contacto con la empresa para ver si habría algún problema en usarla en otra parte del cuerpo, a lo que los diseñadores de la formulación le dijeron que no había ningún problema. Este fue el inicio de toda una revolución ya que pasó a usarse en los labios, dando resultados increíbles, en glúteos e incluso como crema anti arrugas, exacto, resultó ser todo un descubrimiento en el mundo beauty.
Como es lógico pensar, la nueva formulación de la crema no tardó en hacerse eco en el mundo de la belleza, llegando a todas las influencers del momento, consiguiendo miles de reseñas positivas y lo más importante, resultados demostrados y clientas satisfechas.
En muchas ocasiones, puede parecer el fin de una era tener que cerrar un negocio o bien dejar de producir una línea cosmética, pero en determinados casos como ha sucedido con Breaster, ha sido todo lo contrario, tras casi una década de espera en la cual se formuló la nueva crema, consiguieron lanzar toda una revolución en el tratamiento de muchos problemas estéticos como son el aumento de pecho y labios, mejora significativa de las arrugas faciales, disminución de la celulitis e incluso aumento de los glúteos y mejora de su turgencia.
Puede parecer una historia surrealista sacada de una película, pero la realidad a veces supera la ficción, la crema Breaster se lanzó como un tratamiento de aumento y mejora de la firmeza para los senos, pero a raíz de sus consumidoras y la gran exposición que hay actualmente hacía cualquier producto se ha ido descubriendo que sus usos son prácticamente ilimitados.
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