Sólo hace falta hurgar un poquito en las muchas posibilidades de Gmail para sacar a la luz distintas funcionalidades que, para el público en general, son absolutamente desconocidas. Aquí van unas cuantas.
El espacio de redacción en Gmail –en escritorio– es un pequeño cuadro que se abre en la parte inferior derecha. Si vas a escribir un correo largo y te es más cómodo tener un espacio mayor, sólo debes picar en los tres puntitos que hay en la esquina de abajo a la derecha y hacer click en ‘Pantalla completa como vista predeterminada'. Cierra ese correo y la siguiente vez que vayas a redactar un mensaje ya será distinto.
Normalmente, todos los usuarios tienen configurado Gmail para que salgan 50 mensajes por pantalla, pero hay opción de aumentar o disminuir esa cifra. Existe la posibilidad de que haya 10, 15, 20, 25, 50 o 100 mensajes por página. Para cambiarlo, tienes que hacer click en el menú general de configuración –la tuerca que hay en la parte superior derecha en la versión de escritorio–, picar en ‘Ver todos los ajustes' y marcar el número que desees en ‘Tamaño máximo de página'.
Normalmente, después de enviar un mensaje, lo siguiente que hacemos es archivarlo. Uno de los trucos de Gmail da la opción de hacer esto con un solo click. Es decir, enviar y archivar a la vez. Para activarlo, has de ir, de nuevo, a la configuración general –como en el caso anterior– y marcar ‘Mostrar el botón Enviar y archivar en la respuesta'.
¿Cuántos mails recibes en un día? ¿Cuántos de esos mails han sido enviados específicamente a tu correo y no a otros muchos a la vez? Existe una manera de distinguir estos mensajes personales de los generales. Una vez más, debes ir a la configuración general y, en ‘Indicadores de nivel personal', elige ‘Mostrar indicadores'. A partir de ahora, los mensajes que han sido enviados a varios correos se marcarán con una flecha y en los tú seas el único destinatario con dos.
Este truco de Gmail es tremendamente útil. Para empezar, seguro que muchos usuarios ni siquiera sabían que se podía deshacer el envío de un mail si, una vez hecho, te das cuenta de que te has confundido, has cometido un error o, por ejemplo, era otro destinatario. El problema es que, por defecto, sólo hay cinco segundos para deshacer el entuerto. En la configuración general está la opción de aumentar este plazo de rectificación hasta los 30 segundos.
Cuántas veces sucede que vemos un correo, que es interesante, pero no para ahora. Le daremos uso más tarde, o quizá mañana. Puede que dentro de una semana. Gmail te da la opción de posponer un correo para que desaparezca de tu bandeja de entrada y vuelva cuándo tú indiques. Sólo tienes que poner el cursor sobre el correo en la bandeja de entrada y, a la derecha del todo –siempre en la versión de escritorio–, hay un reloj en el que puedes elegir el día y la hora a la que ese mensaje regresará.
Los servicios de mensajería como WhatsApp pusieron de moda la escritura predectiva. Hay personas que la aman y otras que la odian. Si eres de las primeras, entre los trucos de Gmail que no conocías, también está el de activar esta función. Ve a la configuración general y cambia tus preferencias en ‘Redacción inteligente'.
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