Según han indicado fuentes policiales a Europa Press, los agentes localizaron en la noche de este pasado domingo un vehículo que circulaba por La Línea «con la parte trasera muy baja como si llevara algo muy pesado en su interior».
Debido a las sospechas, «al ser un coche que suele utilizar las bandas que se dedican al narcotráfico», los agentes se dirigieron al mismo para requisarlo.
El conductor, al percatarse de la presencia policial, emprendió la huida dando lugar a una persecución que se desarrolló por distintas calles de la localidad linense hasta que finalmente abandonó el vehículo en la calle Ubrique para seguir emprendiendo la huida a pie.
Ante ello, los agentes continuaron la persecución corriendo, hasta que el prófugo logró introducirse en el interior de una vivienda. En ese momento, «los agentes tuvieron que realizar varios disparos ante la avalancha de los vecinos que intentaban agredir a los agentes para que no detuvieran al huido».
Cabe destacar que durante el transcurso de la persecución el vehículo recuperado colisionó con varios vehículos que había estacionado en las vías públicas donde se desarrollo la intervención.
Asimismo, no se ha producido ningún herido ni por parte de los agentes actuantes como de las personas que habían concentradas en el lugar. En el vehículo recuperado se encontraba en su interior un total de 510 kilos de hachís repartidos en varios fardos.
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