Imagen de archivo del ministro de Fomento, Íñigo de la Serna. | Jaume Morey

El ministro de Fomento, Íñigo de la Serna, ha asegurado este miércoles que el sector inmobiliario y de la construcción está preocupado y asustado por la «amenaza» que supone el proceso independentista de Cataluña, un hecho que, según ha dicho, ya se ha traducido en la reducción de transacciones.

«Un sector que estaba en claro crecimiento y que ahora tiene la mayor amenaza que se puede tener cuando uno decide invertir, que es la inestabilidad jurídica que no garantiza que esta inversión vaya finalmente a ejecutarse», ha declarado los medios en la inauguración del salón Inmobiliario Barcelona Meeting Point (BMP).

El ministro ha asegurado que el sector no está dispuesto a asumir «todo este panorama de riesgos», y que empresarios le han trasladado que no están en disposición de desarrollar muchos de sus proyectos por la incertidumbre y la inestabilidad política.

«Lo que clama el sector es que la Generalitat vuelva a la ley y a la Constitución para recuperar la confianza y el crecimiento económico», ha sostenido, y ha añadido que no es el Gobierno central el que ha decidido salirse del marco legal.

Por ello, ha afeado al Govern de Carles Puigdemont que haya decidido optar por «la confrontación y la imposición, creyendo que la voluntad propia está por encima de la legalidad vigente».

Preguntado por si la aplicación por parte del Ejecutivo de Mariano Rajoy del artículo 155 de la Constitución ayudaría a devolver la confianza al sector empresarial, ha considerado que lo que mejoraría la situación es que Puigdemont contestara este jueves rectificando su posición y «despejando cualquier tipo de duda».

«Si así fuera, inmediatamente volvería la confianza desde fuera de Cataluña y se revertiría una situación que ya es insostenible», ha afirmado el ministro.

De la Serna ha llamado a Puigdemont a la sensatez y le ha asegurado que el Gobierno central tiene «la mano tendida, desde el diálogo, en el marco del debate parlamentario», invitándole al Congreso para hablar del futuro, pero regresando siempre antes al cumplimiento de la ley.

«Hay una amplia mayoría en el Congreso que le está pidiendo que rectifique, y si no lo hace el Gobierno se verá obligado, pero sólo porque así lo ha querido Puigdemont, a aplicar el 155», ha advertido.

RECESIÓN

De la Serna ha asegurado que «todos estos riesgos son hoy certezas con la fuga de empresas desde Cataluña», y también con la falta de confianza de la inversión extranjera por la situación política.

Todo ello está generando un «gran daño» a la economía catalana, y ha indicado que algunas agencias de calificación sitúan el crecimiento económico en fase de recesión.

«Se trata de reconducir, que a tiempo está, esta situación, en la que hay una evidente fractura social, un descrédito importante de las instituciones públicas, pérdida de capital económico y humano muy importante de Cataluña, una imagen muy deteriorada en el exterior y un Govern que se ha decidido ubicar fuera de la ley», ha finalizado.