Según han explicado a EFE fuentes judiciales, se trata de una posibilidad que no se contempla a corto plazo dado que todavía quedan por practicar numerosas diligencias, entre ellas las declaraciones de los miembros del Consejo de Fabra que solicitó la Fiscalía.
De ellas se podrían derivar nuevas responsabilidades, tanto de Fabra como de consejeros que tuvieron participación en el proceso de compra de Valmor como José Císcar, titular de Educación hasta finales de 2011, cuando ascendió a vicepresidente y portavoz.
Anticorrupción trata de determinar de quién fue la responsabilidad de la compra en 2011 de Valmor, sociedad participada por Francisco Roig, Jorge Martínez «Aspar» y Bancaja y organizadora inicialmente de la competición automovilística, que fue adquirida por la Generalitat por menos de un euro, asumiendo con ello una deuda cercana a los 40 millones de euros.
Fabra es actualmente senador territorial del PP por la Comunidad Valenciana y Císcar es presidente del PP de Alicante.
La posibilidad de que ambos dirigentes populares puedan ser investigados viene motivada por el avance de las investigaciones y el testimonio de testigos en la investigación abierta por presuntas irregularidades en la organización de la Fórmula 1, en la que ya se investiga al expresidente Francisco Camps, la exconsejera de Turismo, Cultura y Deporte Dolores Johnson y «Aspar».
Al igual que otros exaltos cargos de la Sociedad de Proyectos Temáticos y de la Consejería de Hacienda, uno de los testigos citados a declarar hoy, el exsecretario autonómico de Hacienda y exdirector general de Presupuestos José Miguel Escrig, ha afirmado que todo el Consejo presidido por Fabra desde julio de 2011 conocía la situación patrimonial de Valmor antes de que se produjese la compra.
Esta declaración, según las fuentes consultadas, contradice los testimonios de consejeros del Gobierno de Fabra como Císcar y Paula Sánchez de León, que aseguraron desconocer la deuda que arrastraba Valmor.
Escrig ha negado que negociase la contratación o la compra de Valmor y ha indicado que fue el exsecretario autonómico de Turismo y Grandes Proyectos Luis Lobón quien dirigió el proceso de compra.
Las mismas fuentes han explicado a EFE que la sociedad pública Circuito del Motor facultó a Escrig para negociar la adquisición de Valmor, extremo que él hoy ha negado ante el juez.
Hoy ha declarado también como testigo el exvicepresidente del Consejo (entre 2007 y 2011) Vicente Rambla, quien ha reconocido que Valmor pidió auxilio a la Generalitat al menos en dos ocasiones (2009 y 2011).
Según ha explicado Rambla, en mayo de 2009 se reunió con Roig y «Aspar», quienes se le quejaron por los escasos beneficios obtenidos en la primera edición del Gran Premio de Europa, celebrado en 2008.
Rambla, según diversas fuentes cercanas al caso, ha indicado que planteó a Valmor que ampliase capital o pidiese préstamos al tener constancia de sus deudas, y que se comprometió a trasladar esa inquietud al entonces presidente, Francisco Camps.
En julio de 2009, la Sociedad de Proyectos Temáticos pagó el canon de la F-1 de 26 millones de dólares en lugar de Valmor. Esta acción, según ha reconocido, supuso una modificación del compromiso inicial de Camps de que esta competición no costaría un euro a los valencianos.
También Escrig ha explicado que mantuvo una reunión con Roig, «Aspar», Sánchez de León y otros consejeros en septiembre de 2011 donde los responsables de Valmor hicieron patente la situación insostenible de su empresa, dijeron que estaban prácticamente en quiebra y manifestaron su intención de no seguir organizando la F-1 en Valencia. En diciembre de 2011 el Consejo acordó iniciar el proceso de compra de Valmor.
A preguntas de la Abogacía de la Generalitat y de la defensa de Johnson, Escrig ha afirmado que la compra de Valmor se hizo con pleno conocimiento de la situación patrimonial de esta empresa y por decisión del presidente del Consejo, entonces Alberto Fabra.
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