El presidente del Gobierno en funciones, Mariano Rajoy, ha asegurado este miércoles que no se le ha «pasado por la imaginación» renunciar tras las elecciones del 20 de diciembre y, de hecho, ha dicho que se considera un «activo» para el Partido Popular. Además, ha manifestado una vez más que quiere ser el candidato de su formación si se repiten las elecciones en junio.

«Es mi intención ser el candidato si hay nuevas elecciones. No tenga usted la más mínima duda», ha afirmado rotundo Rajoy en una entrevista en Antena 3. Después, ha añadido: «He llegado a la conclusión de que soy un activo, si no no me presentaría, no soy tan irresponsable».

Preguntado entonces si se considera lo mejor para el PP, el jefe del Ejecutivo en funciones ha contestado: «Creo que sí. Creo que tener un líder independiente y que sepa mantenerse en situaciones difíciles... Es que los mismos que me decían que tenía que pedir el rescate andan por ahí ahora».

Rajoy ha negado que se haya planteado renunciar después del 20 de diciembre, algo que ni se le ha pasado «por la imaginación». «Más que nada porque si renunciara yo, que encabezo lista del partido que ha ganado, tendría que renunciar con más razones el segundo, el tercero, el cuatro y el quinto», ha enfatizado.

En este sentido, el presidente del Gobierno en funciones ha asegurado que no va a dar ese paso atrás porque tiene un «compromiso» después de haberse presentado a las elecciones generales y haber contado con el apoyo de la gente. Según ha precisado, su familia tampoco se lo ha recomendado.

«Le he hecho un servicio a mi país»

Ante las declaraciones de dirigentes del PP como Esperanza Aguirre asegurando que es «tiempo de sacrificios», Rajoy ha dicho que la expresidenta del PP de Madrid ha dado su «opinión» y él la «respeta absolutamente». «Pero somos personas distintas como todo el mundo sabe aunque nos queramos mucho, como todo el mundo también sabe», ha aseverado.

De hecho, el presidente del Gobierno en funciones -que sigue negando el rescate de España- ha indicado que ahora no es su peor momento sino que fue el verano de 2012 cuando tuvo que subir impuestos y la prima de riesgo superaba los 600 puntos. Según ha agregado, en ese periodo vivió una situación «angustiosa» porque España estaba «a punto de quebrar».

Sin embargo, ha dicho que la «satisfacción» de haber superado esa etapa difícil de la economía española le «reconforta» y no se lo va a «quitar nadie». «No gano nada con eso pero creo que solo por eso puedo decir, le he hecho un servicio a mi país. Queda solo para mi», ha enfatizado.

«Sabía que íbamos a tener un resultado malo»

Además, el jefe del Ejecutivo ha confesado que antes de los comicios él ya sabia que el PP iba a tener un resultado «malo» en comparación con el de 2011 y ha señalado que las encuestas así lo recogían. Según ha indicado, el sondeo del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) «acertó» con el PP en sus pronósticos.

Rajoy ha confesado que ya estaba preparado «absolutamente» para el panorama actual porque él era «plenamente consciente» de que tendrían que ir a «un gobierno de coalición» y de que iban a aparecer «nuevos actores» en la vida política española. «Ya antes de las elecciones pensaba que era momento de un acuerdo entre PP y PSOE», ha manifestado.

A renglón seguido, ha señalado que lo que pidió la gente en las elecciones el día 20 no es un cambio sino un pacto. «Y el gran cambio que se podía producir en España era el pacto y era que por primera vez desde 1977 pudiéramos comportarnos como en Alemania, Austria, Finlandia u Holanda, donde los grandes partidos son capaces de pactar», ha resaltado.

El fantasma de la UCD

Al ser preguntado si ha pensado en el fantasma de la UCD, ha afirmado que él no lo pensó pero ha reconocido que «algunos» le han hablado de eso. Sin embargo, ha dicho que la situación del PP no es comparable con el partido que dirigió Alfonso Suárez, al que, según ha recordado, «machacaron inmisericordemente».

Ante el hecho de que empiecen a aparecer nombres en las quinielas como posibles sucesores, Rajoy ha dicho que «por fortuna» él está «acostumbrado». «Y estas cosas te hacen tener fortaleza y darle la importancia que tienen», ha asegurado, para recalcar que «lo importante» es que la gente del partido esté «conforme» con lo que haces. A su entender, la ventaja del PP es que es una formación que existe desde «hace 40 años», es «muy curtido» y toma sus propias decisiones.