Mientras, el PPdeG ha pedido que se deje actuar a la Justicia y el PSdeG se ha limitado a recordar el carácter «jerárquico» de la Fiscalía y que, en todo caso, será el juez el que deberá tomar en consideración o no la propuesta del Ministerio público.
En la rueda de prensa posterior a la Xunta de Portavoces, la viceportavoz de AGE, Yolanda Díaz, ha considerado que era la «muerte anunciada» (en un paralelismo con 'Crónica de una muerte anunciada'), y ha calificado de «escandaloso» que se produzca esta exculpación, algo que, ha añadido, «va a tener consecuencias».
Díaz se ha referido a que el juez Castro ha trabajado en este caso «en unas condiciones difíciles» y ha advertido de que «no es comprensible para la ciudadanía el trato desigual». «Es evidente que hay una justicia para unos y para otros», ha manifestado.
Además, la viceportavoz de AGE, abogada de profesión, y que ha asegurado que ella «ni defiende ni culpabiliza», ha censurado que el Gobierno central pretende «mezclar todo» en la ley de enjuiciamiento nueva, queriendo limitar a seis meses la instrucción de los casos de corrupción. «En seis meses es imposible sustanciar una instrucción», ha avisado.
Por su parte, el portavoz del Grupo del BNG, y a falta de conocer la noticia con mayor profundidad, ha expresado que «no debe haber ningún trato discriminatorio, en este caso positivo, hacia la infanta con respecto a otro cualquier ciudadano».
Jorquera ha opinado que «hay múltiples indicios de que conocía la actividad de su marido y debería sentarse en el banquillo, como se sentaría cualquier otro ciudadano, si se diesen las circunstancias».
PSDEG y PPDEG
Preguntado también por este caso, el portavoz parlamentario socialista ha señalado que el juez es el que decidirá si «acepta o no» el posicionamiento de la Fiscalía, cuya propuesta emitida «aparentemente» tiene la intención de «exculpar en la medida de lo posible a un miembro de la Casa Real».
Dicho esto, ha recordado que la Fiscalía es un «órgano jerárquico» y que «actúa con sujeción al principio de jerarquía y la cúpula está nombrada por el Gobierno». «Lo relevante, es que la decisión última la debe tomar el juez instructor», ha remachado.
El portavoz del Grupo Popular, por su lado, ha declinado «entrar en el juego de otros portavoces políticos» y en cómo han pasado de «considerar (a un fiscal) un héroe de la persecución a ser obediente».
«No voy a entrar en ese juego», ha incidido, tras considerar que el Ministerio Fiscal está «siendo extremadamente exquisito». Así, ha considerado que «hay que dejar trabajar a la Justicia».
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