Montoro (i), junto al sonriente conseller de Economía catalán, Andreu Mas-Colell, al inicio de la reunión del Consejo de Política Fiscal y Financiera. | Emilio Naranjo

El Consejo de Política Fiscal y Financiera (CPFF) ha aprobado con los votos en contra de la Comunidad de Madrid y la abstención de Navarra y el País Vasco la propuesta del ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, de que las autonomías se queden la recaudación del Impuesto de Patrimonio. Los representantes autonómicos coincidieron en señalar que la comunidad más beneficiada era Catalunya.

La Comunitat Valenciana, que tampoco reciben recaudación por esta tasa, ha votado a favor de la propuesta del ministro, según ha avanzado el consejero madrileño de Hacienda, Enrique Ossorio, que ha dicho que es un «contrasentido» que las comunidades más perjudicadas por el sistema de financiación no reciban ahora «ni un euro» con la propuesta.

Según ha dicho el consejero, la propuesta de la Comunidad de Madrid de que los 604 millones de euros que va a dejar de percibir el Estado se repartiesen de manera justa entre las autonomías no se ha votado, y solamente se ha tomado en consideración la propuesta del Gobierno central. «Las comunidades no tendrán que devolver el impuesto del patrimonio del año 2012 en la liquidación de 2014», ha asegurado el consejero a los periodistas al término de la última reunión del año del CPFF.

«Absurdez»

Ossorio ha lamentado la rapidez con que se ha llevado adelante esa propuesta, que, ha dicho, es «una absurdez» porque no beneficia a ninguna de las comunidades que peor evolución han tenido por el sistema de financiación desde el año 2009: la Comunitat Valenciana, Balears y la Comunidad de Madrid.

Las comunidades autónomas que han instaurado el impuesto de Patrimonio, todas menos Madrid, se repartirán en 2013 una recaudación de 1.082 millones de euros, en una solución que tiene carácter «provisional», ha explicado el ministro Montoro.

En 2012, la recaudación fue de 604 millones de euros, una cantidad que las comunidades tampoco tendrán que devolver al Estado a pesar de las compensaciones que habían recibido cuando el anterior Gobierno eliminó este impuesto. Montoro ha desvinculado el hecho de que 541 millones de la recaudación de 2013 correspondan a Catalunya de ningún tipo de debate soberanista.