Mas quiere agotar su mandato al margen de si se celebra la consulta soberanista

El presidente de la Generalitat ha comparecido en una rueda de prensa después de la reunión del Consell Executiu, en la que también ha descartado tomar «decisiones unilaterales» en el proceso soberanista porque pasos de esta «magnitud», ha dicho, se deben asumir por «amplias mayorías».

El motivo de la comparecencia de Mas ha sido hoy dar a conocer su Plan de Govern 2013-2016, una batería 77 objetivos, 355 medidas y 212 actuaciones ejecutivas que, por el momento, no tienen una consignación presupuestaria clara puesto que la Generalitat trabaja este año con las cuentas prorrogadas.

Así las cosas, el debate soberanista ha marcado la comparecencia de Mas, cuyo «primer mensaje» y al que ha dedicado más tiempo ha sido que si la consulta no se celebra en 2014 -algo que por tanto contempla- «la legislatura también acabará al final», es decir, en 2016, periodo en el que en todo caso no cejará en el intento de que se pueda celebrar porque «el rumbo sigue siendo muy claro».

Mas ha subrayado su voluntad de completar una legislatura de cuatro años -tras el adelanto electoral que acabó prematuramente con su primer mandato-, una determinación que sólo podrá alterar, ha dicho, «la pérdida de apoyos estables» en el Parlament.

«Sólo hay una cosa que podría alterarlo, que se pierdan los apoyos estables. Si quedamos en minoría permanente y no hubiera posibilidad de rehacer ninguna mayoría, obviamente se tendrían que tomar decisiones, espero que no sea así, esta legislatura tiene vocación de permanencia», ha afirmado Mas.

El president ha mantenido en este sentido su ofrecimiento a ERC y PSC para que se integren en un gobierno de unidad de «amplio espectro».

«Nuestra voluntad es incorporar a otras formaciones políticas, lo que estaría bien dada la situación del país», ha subrayado Mas, que cree que si hasta el momento no se ha conseguido forjar un Govern de coalición es porque, ha dicho, «en estos momentos ninguna fuerza política ha querido».

Mas ha dejado claro que su ofrecimiento va dirigido en especial a ERC y PSC porque, ha apuntado, «no todas las fuerzas que están en el Parlament pueden estar (en el Govern)», alusión dirigida al PPC.

El president ha explicado que si ERC no se ha integrado en el Govern es «porque no ha querido», mientras que con los socialistas asume que, de momento, «no hay ninguna posibilidad» de acuerdo.

En todo caso, Mas ha marcado distancias con los republicanos. De entrada, ha dicho que no ve necesario, como pide ERC, solicitar una reunión con Rajoy para reclamar formalmente la celebración de una consulta soberanista en 2014, cuestión que da por trasladada en la entrevista que mantuvieron ambos en marzo pasado, asunto que también trató en una reunión con el líder del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba.

«Comunicado está, si le falta solemnidad en la comunicación o no ya hablaremos, pero el compromiso desde el punto de vista de la comunicación está hecho al máximo nivel», ha remarcado.

Asimismo y ante las presiones de los sectores más soberanistas, Mas ha descartado «decisiones unilaterales» en el proceso soberanista porque pasos de tal «magnitud», ha dicho, se deben asumir por «amplias mayorías».

«Hay procesos que no se pueden ganar por el 50 y pico por ciento, esos procesos se deben ganar por mayorías amplias», ha apuntado Mas, para subrayar después que la consulta no tendría «vinculación jurídica» pero sí un carácter «orientativo», un «termómetro claro» de la voluntad de los ciudadanos de Cataluña.

«La consulta no tiene un valor jurídico vinculante, ni aunque fuera un referendo. Los referendos que se han hecho, como el de la entrada en la OTAN, no fueron vinculantes», ha dicho Mas.

Y ha añadido en este sentido: «El resultado de la consulta no tiene una traducción inmediata en 24 horas. Si Cataluña quiere un Estado propio en la consulta, será a partir de ese momento cuando comience la negociación entre demócratas. Este es el marco sereno y positivo que nos conviene».