Los Reyes y los Príncipes han sido recibidos con aplausos por varios cientos de personas en el acto principal del Día de las Fuerzas Armadas de homenaje a los caídos que han presidido en la madrileña Plaza de la Lealtad. Se trata de la primera vez en la que comparecen juntos los Reyes y los Príncipes en una acto institucional fuera del Palacio de la Zarzuela tras la operación quirúrgica a la que se sometió a principios de marzo don Juan Carlos, que ha permanecido en pie durante todo el acto con la ayuda de dos muletas.

Al acto, que ha durado cerca de media hora, han asistido los ministros de Defensa, Pedro Morenés, y de Interior, Jorge Fernández Díaz, así como la cúpula militar encabezada por el jefe de Estado Mayor de la Defensa (JEMAD), almirante Fernando García Sánchez. Varios cientos de personas han asistido a la ceremonia, que ha consistido en una ofrenda floral ante el monumento a todos los caídos en la Plaza de la Lealtad de Madrid, donde se sitúa un monolito con una llama encendida permanentemente. A las 12:30 horas, el Rey, vestido con el uniforme del Ejército de Tierra que le acredita como máximo responsable de las Fuerzas Armadas, ha llegado a la plaza junto a Doña Sofía, momento en el que se han empezado a escuchar aplausos y gritos de «viva» el Rey. También se han escuchado vivas a doña Sofía y a los Príncipes durante el acto y especialmente al finalizar.

Brevedad

Marcada por la solemnidad y la brevedad, la ceremonia ha arrancado con el saludo al ministro de Defensa y al JEMAD, quienes le recibieron a su llegada. A continuación el Rey ha saludado a las autoridades civiles y militares presentes, entre quienes se encontraban también la alcaldesa de Madrid, Ana Botella, y la delegada del Gobierno en Madrid, Cristina Cifuentes.

Al son de «La muerte no es el final» y con las autoridades en pie, se realizó la ofrenda floral, con la colocación de una corona ante la llama permanente que arde en memoria de los fallecidos.