La vicepresidenta segunda del Gobierno y ministra de Economía, Elena Salgado (en primer término), junto a la vicepresidenta primera, María Teresa Fernández de la Vega, en la rueda de prensa posterior a la reunión del Consejo de Ministros. | Ballesteros

El Gobierno ha introducido en el proyecto de Ley de Presupuestos un aumento al 44% del tipo marginal del IRPF al que tributarán las rentas que superen los 120.000 euros anuales, un punto más que actualmente, y ha incrementado en dos puntos, hasta el 45%, el marginal de las rentas que superen los 175.000 euros a partir del 1 de enero de 2011, según confirmó ayer el Gobierno.

Esta medida afectará a unos 3.500 contribuyentes en Balears, de acuerdo con las estimaciones de la Conselleria de Economía i Hisenda, y no a los cerca de veinte mil que publicó ayer este periódico. Por contra, el sindicato de técnicos de Hacienda Gestha calcula que los afectadios en Balears serán 18.828.

Afectados
El Gobierno calcula que el número de contribuyentes que verán incrementada la tributación del IRPF a partir de 2011 se sitúa en torno a 100.000 en toda España, cifra inferior a las que se habían ofrecido hasta ahora, debido a que los datos recogían la base imponible general y no sólo las rentas procedentes del trabajo, que son las que ahora se incrementan.

Tras la última reforma fiscal, aprobada por el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero, el IRPF cuenta ahora con cuatro tramos: del 24% para las rentas de entre 5.050 y 17.360 euros, del 28% para los ingresos de entre 17.360 y 32.360 euros, del 37 % entre 32.360 y 52.360 euros y del 43% para los ingresos a partir de este importe y hasta 120.000 euros.

A partir de 2011 contará con dos nuevos tramos, uno que irá desde los 120.000 euros hasta los 175.000, gravado con un 44%, y otro para las rentas que superen los 175.000 euros, con un tipo del 45%.

Pensiones
Por otro lado, la vicepresidenta primera del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, ha anunciado que las pensiones mínimas subirán el próximo año una media del 1%, ya que estas prestaciones no están afectadas por la congelación aprobada para 2011 por el Gobierno.

Según fuentes ministeriales consultadas por Europa Press, unos cuatro millones de pensionistas de mínimas verán incrementada su pensión en 2011 una media del 1%, a lo que habrá que sumar la compensación y posterior consolidación en nómina de la desviación del IPC de este año en caso de que la inflación interanual del próximo mes de noviembre supere el 1%, que era el objetivo de precios para 2010.

El resto de pensiones, que sí están afectadas por la congelación, no experimentarán subida alguna en 2011, salvo la derivada de la desviación de precios de este año. Es decir, que los pensionistas que no perciben prestaciones de mínimos notarán en su nóminas del próximo año que se les ha subido la pensión, pero sólo como resultado de la desviación de precios de este año.

En caso de que en noviembre de 2011, la inflación interanual se situara por encima del 1%, los pensionistas de mínimas sí serían compensados por la desviación de precios, pero sólo ellos, pues el resto de pensionistas, al no haber experimentado subidas en su prestación como consecuencia de la congelación, no recibirán compensación alguna.

En cualquier caso, el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, como otros miembros de su Gabinete, entre ellos la vicepresidenta primera, María Teresa Fernández de la Vega, y el ministro de Trabajo, Celestino Corbacho, han declarado en alguna ocasión que, cuando la crisis escampe y la situación económica mejore, el esfuerzo pedido a los pensionistas se vería compensado en el futuro.

Según datos del Ministerio de Trabajo, el número de pensiones contributivas de la Seguridad Social es actualmente de 8.697.520, un 1,6% más que en septiembre de 2009. De esta cantidad, 5.160.709 pensiones son de jubilación, 2.294.015 de viudedad, 935.288 de incapacidad permanente, 269.849 de orfandad, y 37.659 de favor de familiares.

La inflación interanual de noviembre es la que se utiliza para proceder a la revalorización de las pensiones. Cuando hay desviaciones sobre el objetivo de inflación previsto para el ejercicio, los pensionistas son compensados por medio de una paga que se abona en enero.