Los síntomas aparecidos en los tres casos fueron ojos enrojecidos, lagrimeo constante y molesto y descamación en la piel de las manos y la cara, según el rotativo, que atribuye el posible ataque a «elementos radicales de Moscú» que trataban de boicotear esas negociaciones por el alto el fuego. Pese a esos síntomas, se ha afirmado que sus vidas no corren peligro y todos ellos están evolucionando positivamente.
Abramóvich estuvo viajando entre Leópolis, Moscú y otras capitales en sus esfuerzos de mediación entre los gobiernos ruso y ucraniano, y aunque se reunió con el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, este último no resultó afectado, según confirmó su portavoz, citado por el diario. Las fuentes precisaron que era difícil determinar si el posible envenenamiento fue causado por un agente químico o biológico, fruto de la contaminación atmosférica, o si se trató de una radiación electromagnética.
Al parecer recientemente el expropietario del club de fútbol inglés, actual campeón de la Liga de Campeones, viajó a Moscú para trasladar al presidente ruso las condiciones de paz del presidente de Ucrania, según The Times. A la luz de la información del medio, la respuesta de Putin fue contundente: «Dile que les aplastaré». Estas informaciones coinciden en el tiempo con los rumores sobre el estado de salud del ministro de Defensa ruso, Sergéi Shoigu, que este lunes el portavoz del Kremlin se ha ocupado de desacreditar.
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