Europa busca solución final a la 'crisis de los relojes' enchufables. | VARISTOR60 / WIKIMEDIA

La entidad que coordina el transporte de energía europeo ha dado por resuelto el desfase de sincronización que retrasaba los relojes eléctricos, y busca una solución "sostenible" para que no se repita.

Las redes eléctricas del continente gestionadas por ENTSO-E, una gran área sincronizada que se extiende desde España a Turquía y desde Polonia a los Países Bajos, sumando 25 países, experimentaron una desviación continua de frecuencia del sistema con respecto al valor medio de 50 Hz desde mediados de enero de 2018.

Las desviaciones de potencia se originaron en el área de control llamada Serbia, Macedonia, Montenegro (bloque SMM) y específicamente Kosovo y Serbia. Serbia no reconoce la independencia que la región de Kosovo proclamó en 2008. Las desviaciones de potencia han llevado a una ligera disminución en el promedio de frecuencia eléctrica. Esta desviación de frecuencia promedio llegó a alcanzar los 113 GWh.

La disminución en el promedio de frecuencia afectó a los relojes eléctricos que son dirigidos por la frecuencia del sistema de potencia y no por un cristal de cuarzo, hasta el punto de registrar un retraso que el 6 de marzo se acercaba a los seis minutos.

DESVIACIONES CORREGIDAS

En un comunicado del fechado el 8 de marzo, ENTSO-E, la asociación que agrupa a los operadores de trasnporte de energía eléctrica (TSO)europeos, informó que había confirmado con los TSO serbio y kosovar, respectivamente EMS y KOSTT, que las desviaciones que afectaron la frecuencia promedio en el área síncrona de Europa continental han cesado.

"Este es un primer paso en la resolución del problema. El segundo paso ahora es desarrollar un plan para devolver la energía faltante al sistema y volver a la situación normal", advierte ENTSO-E.

En estrecha interacción con la Comisión Europea, la entidad explica que está tratando de identificar una solución sostenible a largo plazo que evite que esto vuelva a ocurrir. Reconoce que la situación experimentada no tiene precedentes en el Sistema Energético Europeo Continental.