La Policía de Alemania continúa con la búsqueda de los cuatro presos que se fugaron el jueves de una prisión de Plötzensee, en el noreste de Berlín, haciendo un agujero en el muro del centro penitenciario, según ha informado una portavoz del cuerpo.
«Todavía no ha habido ningún arresto ni ningún cambio en la situación actual», ha explicado la portavoz de la Policía de Berlín. La Policía ha ampliado la zona de búsqueda de los reos fugados, de edades comprendidas entre los 27 y los 38 años, al vecino estado de Brandeburgo.
Los cuatro presos, que fueron encarcelados en 2017 por delitos que incluyen el robo, la extorsión y lesiones graves, consiguieron fugarse de la cárcel haciendo un agujero en el muro de la sala de calderas con la ayuda de una herramienta para moler y un martillo, según la versión policial.
Poco antes de su fuga, los cuatro reclusos estaban trabajando junto a otra decena de reos en un taller de reparación de coches próximo a la sala de calderas. Las autoridades han dicho que todavía no se sabe cómo llegaron los cuatro presos hasta la sala de calderas, que suele estar cerrada. La sala tiene una puerta con candado de seguridad, que fue abierto con su llave.
La cárcel, situada en el noroeste de Berlín, alberga a 632 presos, según datos oficiales. El complejo data de la época nazi, cuando fue construido para alojar a unos 3.000 reclusos, incluidos los implicados en el fallido intento de asesinar a Adolf Hitler el 20 de julio de 1944.
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