Un hombre encapuchado que dijo pertenecer al Dáesh hirió hoy con un arma punzante a un profesor en una escuela infantil de la ciudad de Aubervilliers, en las afueras de París, y después se dio a la fuga, indicaron fuentes oficiales.
La agresión se produjo poco después de las 07.15 locales (06.15 GMT) en la escuela Jean Perrin, que todavía se encontraba cerrada a los alumnos.
«BFM TV» señaló que el agresor, que iba encapuchado y vestido con un mono de pintor, hizo con un objeto cortante que cogió en la clase un corte en el cuello al maestro, al que gritó: «Es Dáesh y es una advertencia».
Esa amenaza, según confirmaron a Efe fuentes judiciales, fue la que llevó a la Fiscalía de París a abrir una investigación antiterrorista.
El profesor, de 45 años de edad, y que trabajaba en ese centro desde hace 20, se encuentra hospitalizado pero, según esas mismas fuentes, su vida no corre peligro.
Las clases se suspendieron este lunes en la escuela y la dirección convocó una reunión informativa con los padres para tranquilizarlos.
Los hechos ocurrieron un mes después de los atentados yihadistas que golpearon París el 13 de noviembre pasado y causaron la muerte de 130 personas, además de herir a varios cientos.
La revista francófona de propaganda del Estado Islámico «Dar al Islam» descalificaba en su número de finales de noviembre a los profesores por considerarlos «enemigos de Alá» y criticaba que «enseñan el laicismo» y están «en guerra abierta contra la familia musulmana».
La organización en esa misma edición instaba a actuar contra «los funcionarios de la Educación Nacional que enseñan el laicismo», y consideraba «una obligación combatir y matar (...) a esos enemigos de Alá».
Desde los ataques de noviembre, las medidas de seguridad en torno a los centros escolares se han reforzado, por ejemplo con la prohibición de aparcar delante o con un aumento de las patrullas policiales.
La ministra de Educación, Najat Vallaud Belkacem, se desplazó hoy hasta el colegio en el que tuvo lugar la agresión y anunció que se iba a incrementar el dispositivo de seguridad en esa escuela infantil y en otras de los alrededores.
«Es un acto de gran gravedad», «en un contexto en el que sí, la escuela se siente amenazada», añadió la ministra, que avanzó el lanzamiento de un plan para que profesores y personal del sistema educativo a nivel nacional tengan conocimientos de primeros auxilios.
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