Los habitantes sirios de Al Houla entierran a los más de cien muertos en la matanza del pasado fin de semana. | HANDOUT

El enviado especial de la ONU y la Liga Árabe para Siria, Kofi Annan, calificó ayer de «crimen espantoso» la masacre en la ciudad siria de Houla, donde el pasado viernes murió más de un centenar de personas, y pidió al régimen sirio «pasos efectivos» para resolver la crisis por vías pacíficas. Annan, que viajó ayer a Damasco, confesó estar «impactado» y «horrorizado» por los hechos.

«Fue un crimen espantoso y el Consejo de Seguridad (de la ONU) lo ha condenado», dijo el enviado internacional que se encontró con una nueva matanza a su llegada. Al menos 50 personas han muerto a lo largo de las últimas 24 horas a causa de los bombardeos del Ejército sirio contra Hama, según informaron este ayer fuentes opositoras desde esta ciudad.

Ataque

Los carros de combate y los vehículos de combate de la infantería abrieron fuego el domingo contra algunos barrios de Hama en respuesta a una serie de ataques de los rebeldes del Ejército Libre Sirio contra puestos de control del régimen de Bashar al Asad, según las citadas fuentes.

El ministro ruso de Exteriores, Serguei Lavrov, dijo que la provincia siria de Homs, donde se encuentra Houla, «está controlada por la guerrilla armada y rodeada por las fuerzas gubernamentales» y agregó que los hechos deberán ser investigados por la ONU. «Nuestra postura coincide con el comunicado acordado en la madrugada de ayer por el Consejo de Seguridad, que condena con rotundidad cualquier violencia y que subraya la responsabilidad del Gobierno sirio en cuanto al cumplimiento del plan de Annan», indicó Lavrov. China condenó también en los «más firmes términos» la matanza en la ciudad.