Las noches de verano tienen un encanto especial. Quizás es porque el tiempo se ralentiza ya que se respiran vacaciones en el ambiente, quizás es por la bajada de las temperaturas, que por las noches nos regalan un descanso, sea por lo que sea las veladas de verano saben diferente y en Can Tothom todavía más.
Todos los viernes encienden las brasas para preparar sus ya tradicionales espetos de pescado. A partir de las 19:00 horas y hasta las 23:30 horas la barca ubicada en la arena frente a la terraza tiene su noche de gloria para cocinar el mejor pescado fresco al punto de sal. El kiosko, ubicado en primera línea de playa, en el Port de Sant Miquel, todavía conserva ese ambiente local que se entremezcla como antaño con los turistas que quieren tener una auténtica experiencia mediterránea a pie de playa.
Para comenzar bien el fin de semana Can Tothom propone saborear lo mejor del mar, el pescado a través de sus espetos, que consisten en ensartar pescado en espadas o cañas y cocinarlo en las brasas en la arena. Se pueden degustar los más tradicionales, como los de sardina, pero también están los de gambones, de lubina o dorada. Uno de los más solicitados es el pulpo espetado, que es una delicatessen para los paladares más aventureros. Acompañados de verduras asadas o de ensaladas frescas son una forma maravillosa de pasar una velada totalmente playera.
Con un ambiente local, ideal para niños por su ubicación a pie de playa, Can Tothom se posiciona como una opción perfecta para familias. Además de la carta especial de los días de espetos, también está disponible la carta habitual que mantiene los sabores de siempre a través de sus arroces, pero no se olvida de los toques internacionales.
Tanto su paella ibicenca como su arroz con bogavante son un clásico para los paladares más tradicionales, pero existen opciones para todos los gustos. Ensaladas frescas o templadas, así como platos ideales para compartir como el hummus con crudités o los sabores más internacionales que se encuentran en platos como el tartar de salmón o el curry regalan una experiencia única para toda la familia.
Este año también han renovado su carta de desayunos que completan su oferta con propuestas llenas de sabor para que cualquier momento sea bueno para visitar Can Tothom.
Desde el clásico sabor ibicenco hasta el bol de yogur con muesli y frutas así como tostas de salmón, aguacate, huevo o jamón ibérico, cualquier opción es buena para empezar el día en el Port de Sant Miquel.
Visitar Can Tothom es volver a disfrutar del ambiente de siempre en la casa de todos.
