Riu mantiene una estrecha vinculación con TUI, aunque la compañía no es ajena a la tendencia general que apunta a un retroceso de la turoperación. «Es verdad que canales como el directo (call center y riu.com) o las OTA han ganado fuerza frente a la turoperación tradicional. Pero también es cierto que en el caso de Riu las ventas a través del turoperador siguen siendo muy importantes. De hecho este verano han representado, a nivel global, más del 60%. En cualquier caso, las cifras varían mucho dependiendo de los destinos. Por ejemplo, tienen poco peso en las ventas de los hoteles de ciudad, mientras que son casi exclusivas en destinos con poca conexión regular y que son tan importantes para nosotros como Cabo Verde», argumenta.
Riu mantiene desde hace años una apuesta contundente por la protección del medio ambiente y la circularidad. La nueva ley turística aprobada no va a suponer grandes cambios para la multinacional mallorquina. «Antes de la ley ya cumplíamos muchos de sus requisitos. Por ejemplo, nuestro proyecto de hoteles circulares permite tener un proceso circular de los residuos orgánicos que generamos. También el tema de las camas elevables, que ya están desde hace años en todos nuestros hoteles de Palma. En cualquier caso estamos trabajando en una estrategia que nos permita abordar ese plan de circularidad global. En lo que respecta a las medidas en trasformación energética, hemos apostado por la monitorización de la energía. Se han instalado placas solares en las azoteas de los hoteles de Playa de Palma. El plan es establecer objetivos de reducción de consumos energéticos desde 2023 hasta 2025. Lo más importante es trabajar de forma conjunta para conseguir una gestión cada vez más sostenible que es una obligación de todos. Hay que aprovechar el consenso que actualmente existe entre la población, gobierno y empresarios sobre este tema. Y también exigir a la administración que asuma la parte que le toca en cuanto, por ejemplo, al suministro de energía o saneamiento del agua», asegura.
En este sentida, Trian hace una valoración positiva de la nueva Ley de Turismo aprobada por el Govern. «La nueva ley turística que ha aprobado el Govern va en la buena dirección. Encuentro acertado el análisis de partida porque hace años que desde Riu creemos firmemente que la sostenibilidad involucra el medio ambiente, al cliente, a los empleados y a la comunidad y desde este enfoque es desde el cual el Govern ha enfocado el cambio legislativo. Pero las instituciones públicas de Balears también son protagonistas del cambio y deben hacer su parte. Nuestra sede está en la comunidad líder en hotelería vacacional y todos los agentes podemos liderar ahora la innovación en la forma de hacer negocio turístico y cómo este impacta en el entorno y en las personas», manifiesta.
El consejero directivo de Riu explica que el turismo se ha desbocado en los últimos años y reconoce dificultades para el residente. «Hace años el turismo estaba concentrado en ciertas zonas de Mallorca y esto aportaba cierto orden. Sin embargo, hoy en día, y en gran parte debido al alquiler vacacional, hemos pasado a tener un turismo desbocado. Esto ha provocado una tensión en los servicios y ha alterado el día a día de muchos ciudadanos. No puedo concretar una cifra adecuada de turistas, pero está claro que hay que tomar medidas para ordenar la actividad turística y recuperar calidad para el visitante y para el residente», manifiesta.
Durante el verano se han alzado algunas voces reclamando que Mallorca no se siga promocionando, que no es necesario, ya que los problemas de masificación en algunos lugares son más que evidentes. Trian defiende que la promoción turística es tan necesaria como imprescindible. «Nuestro modelo económico gira alrededor del turismo, es nuestra principal industria y como tal tenemos que cuidarla. Tenemos que estar presentes y tener relación en todos los agentes turísticos en diversidad de mercados. Si queremos dar a conocer la variedad de la oferta y la calidad, tendremos que hacer ese esfuerzo por promocionarla», asegura.